Afirma que las odiaba por ser mujeres y no siente arrepentimiento por los homicidios que cometía sintiendo placer.

TOLUCA.- “Mi próxima víctima tenía que ser una madre soltera, dejada o divorciada como sucedió con la mía”, declaró el presunto feminicida serial Juan Carlos “N” a las autoridades ministeriales de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, tras su detención.

Juan Carlos fue detenido junto con su pareja Patricia “N”, el viernes 05 de octubre afuera de su casa en Jardines de Morelos, Ecatepec, mientras ambos trasladaban en carriolas restos de sus víctimas, mismas que según el detenido ascendían a por lo menos 20 desde 2012.

Culpó a su madre, quien en la infancia lo vestía de niña, de odiar a todas las mujeres que cayeron en sus manos y por eso no arrepentirse de sus crímenes, sino hasta sentir placer al matar y descuartizar mujeres.

“Sólo era por momentos que surgía en mí el deseo de matar mujeres y cuando esto sucedía me daba a la tarea, junto con mi esposa de buscar a próxima víctima”, insistió.

Arlet, Evelyn y Nancy Nohemí, cuyos restos fueron hallados en una vivienda de Jardines de Morelos, en Ecatepec, donde vivían los presuntos asesinos y en cuyos terrenos aledaños dispersaban restos humanos, cumplían con el perfil que buscaba Juan Carlos: eran madres solteras, separadas, divorciadas o abandonadas.

Los presuntos delincuentes fueron ubicados gracias a que las madres de estas jóvenes, todas menores de 30 años de edad, proporcionaron información vinculante sobre sus casos.

Juan Carlos “N” declaró al agente del Ministerio Público que a algunas de sus víctimas las abusó sexualmente antes de matarlas, vendió sus pertenencias y hasta los huesos de las jóvenes.

Ese testimonio coincide al que proporcionó a policías ministeriales en un primer interrogatorio, donde dijo que esos restos los comercializó a un sujeto apodado “El Bons”.

A las jóvenes, contactadas vía redes sociales por su cómplice y esposa, las desmembraba con un cuchillo en el baño y después colocaba los restos en cubetas o los conservaba en el refrigerador para deshacerse de ellos tirándolos en coladeras, basureros, orillas de avenidas o predios abandonados.

Los colocaba en cubetas de 20 litros -algunas de ellas también fueron encontradas cubiertas con cemento- y los transportaba en una carriola junto con su esposa, dedicada a la venta de ropa americana usada.

Ambos fueron definidos por vecinos como un matrimonio tranquilo que alquilaba un cuarto en la colonia y se dedicaba a prestar dinero a rédito.

Sin embargo, en el que se ha identificado como el posible perfil en redes sociales de Juan Carlos, se encontraron imágenes relacionadas a la Santa Muerte y figuras de satán.

Además, seguía un sitio de frases de asesinos seriales y a un distribuidor de ácido muriático y sosa cáustica.

“Tú que todo lo sabes Madre Mía, te pido que no me abandones", es una oración hacia la Santa Muerte publicada por Juan Carlos y Patricia el 03 de octubre.

De acuerdo a expertos, el presunto homicida serial actúa con conciencia y distingue entre el bien y el mal, por lo que su personalidad es de sociópata y está relacionada con problemas psicológicos sufridos en su infancia, por culpa de su madre, de acuerdo a comentarios suyos.