Es poco común, pero puede presentarse si el menor mantiene temperatura corporal de 42 grados centígrados por un periodo prolongado.

Redacción/ HIPTEX

TIJUANA.- El daño cerebral a causa de la fiebre no suele ocurrir a menos que el paciente presente temperatura de 42 grados centígrados por un período prolongado; sin embargo, es necesario que los padres de familia vigilen a los niños para evitar que esta condición se haga presente.

Si el menor se encuentra decaído y con temperatura elevada se debe acudir a los servicios de Urgencias del IMSS para nivelársela.

En ello insistió Octavio Castro Méndez, jefe de consulta de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 7 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Tijuana.

Algo no está bien cuando la temperatura corporal es superior a los 37.5 grados centígrados, indicó.

La fiebre, dijo, también conocida como calentura o hipertermia, se manifiesta con el incremento de la temperatura corporal por encima de 37 grados centígrados, situación que requiere atención médica.

Un error común, aclaró, es tratar de apreciar la temperatura con un beso en la frente o tocando levemente la piel; para conocer con exactitud la temperatura es indispensable utilizar un termómetro.

Hay varias formas de tomar la temperatura: bajo el brazo, en la boca, en el oído o en el recto, puntualizó.

“El principal objetivo de controlar la fiebre es lograr que el niño esté cómodo; si no se aprecia otro problema, se deben adoptar medidas como mantener la habitación sin corrientes de aire. Cuanta más fiebre tenga el niño, menos ropa debe llevar, de preferencia dejarlo en pañal o con una prenda ligera”.

Se deben colocar paños humedecidos en agua tibia en la cabeza y el tronco  hasta que la temperatura baje a menos de 38 grados; no use alcohol ni hielo. Lo ideal es darle un baño en agua tibia de entre 20 y 45 minutos.

Es indispensable ofrecerle agua, sopa o gelatina al menor para evitar la deshidratación, debido a que la fiebre provoca una rápida pérdida de líquidos, precisó el médico.

El niño debe consumirlos en la medida que le apetezca en cantidades razonables y no obligarlo, porque se corre el riesgo de provocar vómito.

La automedicación en los menores puede exponerlos a intoxicaciones, advirtió, es común que se les apliquen dosis no recomendadas de acuerdo a la edad, peso y talla.

Las infecciones por virus o bacterias son la causa más común de fiebre en los niños y generalmente no son graves; pero sí es fundamental saber qué la originó para contrarrestarla.

Entre los padecimientos virales que la provocan, se encuentran la gripe, resfriado común, hepatitis y enfermedades exantemáticas; como sarampión, rubéola y varicela, entre muchas otras, concluyó. (lgs)