Por: Alberto SARMIENTO REYES / HIPTEX

Tras el triunfo arrollador de Andrés Manuel López Obrador en Baja California, se ha desatado una guerra por las candidaturas del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) entre personajes que tienen en común no ser militantes del partido que formó el virtual presidente electo de México.

A través de sus redes sociales, en reuniones organizadas para promoverse y en notas periodísticas el empresario Arturo González Cruz; el ex delegado de Solidaridad, Jaime Martínez Veloz, y el líder de los comerciantes organizados, Mario Escobedo Carignan, protagonizan una abierta confrontación por la gubernatura del estado y/o la alcaldía de Tijuana para los comicios de 2019, a pesar que de ganar gobernarán apenas dos años, por la reforma electoral en vigor.

Los vaticinios políticos indican que una ola gigantesca del tsunami provocado por la candidatura López Obrador llegará a Baja California en las elecciones del próximo año… haciendo ganadores a los candidatos que postule MORENA, con o sin sus actuales aliados, los partidos Encuentro Social (PES) y del Trabajo (PT).

Aunque en el sector empresarial, del que forman parte González Cruz y Mario Escobedo, se comenta que ambos serán los candidatos a la gubernatura y alcaldía de Tijuana, respectivamente, al interior de MORENA hay una corriente que apuntala a Martínez Veloz para una u otra posición. 

MORENA es, tras los comicios federales del uno de julio, la franquicia política más rentable en México, ello explica la disputa que se libra por las candidaturas para los comicios de 2019, que serán los primeros en la era en que AMLO gobierne México.

Jaime Bonilla Valdez, senador electo y futuro coordinador del Gobierno Federal en Baja California, en su papel de líder moral de MORENA en la entidad, ha decidido jugar el papel de “árbitro” en la anticipada contienda, luego que decidiera esperarse hasta el 2021 para ser candidato a la gubernatura, bajo la premisa que aplica todo político “cuesta lo mismo una campaña para gobernador de dos que una para seis años”.

Además de su ambición por ser candidato de MORENA y haber sido “distinguidos” militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI), tanto González Cruz, como Mario Escobedo y Martínez Veloz tienen en común el no ser militantes del partido de AMLO, aunque a los tres se les vio muy pegados a la campaña del tabasqueño, cada uno desde su espacio de influencia. Solo el ex delegado de la dependencia creada por Carlos Salinas de Gortari asistió al mitin de cierre de campaña de López Obrador en Tijuana.

¿Quién dio la orden de encampanarse a a estos personajes? ¿Bonilla, AMLO?

Es difícil saberlo. Pero lo que sí es seguro es que será López Obrador quien DECIDA las candidaturas a la gubernatura de Baja California y a las cinco alcaldías de la entidad y, en una de esas, íntegra la lista de candidatos a diputados locales.

Basta recordar que fue López Obrador quien DECIDIÓ que Jaime Bonilla fuera dirigente de MORENA en BC, que el empresario cercano a Xicoténcatl Leyva Mortera fuera candidato al senado de república y fue el tabasqueño quien ha DECIDIDO que no será senador sino coordinador de su gobierno en en la entidad.

MORENA es López Obrador… así que serenos “morenos”.