El ya gobernador electo afirmó que defenderá sus derechos políticos en “las últimas instancias”.
Redacción/ HIPTEX
TIJUANA.- “Yo tengo mis derechos políticos, estoy seguro que vamos a llevarlos hasta las últimas instancias. Vamos a buscar mis derechos políticos y vamos a lo que digan las autoridades, en este caso la Suprema Corte de Justicia de la Nación”.
Así respondió el gobernador electo Jaime Bonilla Valdez a si impugnará la gubernatura de dos años que le tocará encabezar en Baja California.
Lo anterior, después de que poco antes de la elección en la que resultó vencedor, la Sala Guadalajara del Tribunal Electoral de la Federación desechara el fallo del Tribunal Electoral del Estado de Baja California, que había cambiado a seis años la duración de ésta, antes aprobada de dos años por el Congreso del Estado por empate con las elecciones federales.
En una de sus primeras declaraciones a la prensa como gobernador electo, dijo que el procedimiento se lo deja a sus abogados y partido, pero anticipó que llevará sus derechos políticos hasta las últimas instancias, que son la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Por otro lado, asentó que tan pronto inicie su gobierno desaparecerá la Policía Estatal Preventiva y entrará una policía en un esquema claro y de mucha responsabilidad.
Comentó que ahora que ya recibió su constancia de mayoría, espera que el gobernador Francisco Vega de Lamadrid le abra la puerta y comience la transición que éste condicionó al documento.
Sobre la designación del fiscal general del Estado acotó que si es neutral, no carnal no hay objeción, “pero en este momento sospechamos”.
Antes, en su discurso en el Instituto Estatal Electoral tras recibir la constancia de mayoría como gobernador electo, subrayó que será un gobernador para todos, independientemente de partidos, ideologías o credos.
Además, respetuoso de la separación de los poderes y comprometido con que Baja California sea “el brazo fuerte del país”, por lo que llevará una gestión de trabajo, trabajo y trabajo. (lgs)