La guerra comercial impulsada por el presidente de Estados Unidos comienza a tener efectos negativos en los norteamericanos debido a aranceles interpuestos como represalia por sus socios afectados.

NUEVA YORK.- Estados Unidos dará ayudas de emergencia a los agricultores que sufren los daños colaterales de la estrategia comercial de Donald Trump, que implica aplicación de aranceles a mercancías provenientes de otros países que han actuado de la misma manera con la proveeduría estadounidense.

El plan es movilizar 12 mil millones de dólares en asistencia a corto plazo para ayudarles a protegerse de los efectos de dicha política económica.

De acuerdo al Departamento de Agricultura la ayuda estará destinada a los productores de cerdo, cereal y lácteos.

El precio de la soya en Estados Unidos se desplomó como consecuencia de las medidas implementadas por China, su mayor cliente, como reacción a los aranceles norteamericanos.

Sin embargo, organizaciones que representan a los productores del sector agrícola están conscientes de que si la estrategia comercial se prolonga, además de poner en peligro sus ventas en el exterior volverá difícil recuperar los mercados.

La tensión comercial ha obligado a la administración que preside Donald Trump a ajustar su estrategia. Viajó este martes a Kansas City, en el Estado de Missouri, y el miércoles irá a Iowa. Agricultores y ganaderos de esa zona fueron claves para que llegara a la presidencia.

Pero los agricultores no son los únicos afectados por los aranceles, cuyo efecto comienza a reflejarse en multinacionales. El encarecimiento del acero y aluminio ha afectado a Harley-Davidson, Whirlpool y Black & Decker.

La primera estima pérdidas por 100 millones de dólares que planea compensar llevando parte de la producción de motocicletas fuera de Estados Unidos para proteger su negocio en Europa y las dos otras marcas elevarán precios de sus productos para mitigar las alzas.