En México de 2006 al 2016 fueron encontradas alrededor de dos mil fosas clandestinas; hasta 2017, solo habían sido identificados mil 738 víctimas.
CDMX.- Restos de saliva, cabello o uñas son elementos esenciales para la conformación de un biobanco forense, el cual puede contribuir a la identificación de restos humanos.
Debido a ello, asociaciones civiles, integradas principalmente por personas con familiares desaparecidos, crearon un biobanco con el fin de identificar los restos humanos.
Amaranta Manrique, colaboradora del artículo "Biobancos y registros médicos electrónicos", elaborado en conjunto con la Oficina de Información Científica y Tecnológica para el Senado de la República y la Cámara de Diputados (INCyTU), se refirió a este tipo de depósitos que han sido creados para ayudar a la identificación de cuerpos.
“Las familias que han sido víctimas de la violencia o que tienen un familiar desaparecido han creado redes de apoyo y hacen el trabajo de campo, van a las fosas caminan entre los restos y recopilan la información para ver si coincide”, comentó Manrique.
Dichos biobancos se nutren de la información que proporcionan los mismos familiares y ésta puede ser restos de saliva, cabello o uñas, entre otros, con el objetivo de que sea un depósito de información genética ante la falta de una base nacional de referencia.
Actualmente, el Biobanco de la Red Ciencia Forense Ciudadana cuenta con aproximadamente 450 muestras de un registro de 900 familias, según información del Foro Consultivo Científico y Tecnológico.
Manrique opinó que “los biobancos forenses en México son ineficaces, principalmente por la falta de comunicación entre ellos. Además de que la información que tienen no está homologada, lo que dificulta la búsqueda”.
Destacó que los biobancos requieren de una regulación apropiada para su operación, que incluya calidad, buenas prácticas de manejo de muestras, supervisión ética y legal.
En la actualidad están los biobancos de Registros Médicos Electrónicos (RME) como: Laboratorio Nacional Biobanco, que tiene fines de investigación biomédica, y Centro de Atención e Investigación Médica (CAIMED), una organización internacional con operaciones en América Latina y el Caribe.
La identificación de restos es un proceso legal de responsabilidad y obligación del Estado. Algunas instituciones y organizaciones que hacen uso de los datos son: la Procuraduría General de la República, la División Científica de la Policía Federal y el Instituto de Ciencias Forenses de la Ciudad de México, las cuales tienen bases de datos de perfiles genéticos propios, así como software de gestión específicos a cada uno.
De acuerdo con el Foro Consultivo Científico y Tecnológico, en México de 2006 al 2016 fueron encontradas alrededor de dos mil fosas clandestinas, de las cuales las fiscalías recuperaron dos mil 884 cuerpos, 324 cráneos, 217 osamentas, 799 restos óseos y miles de pedazos de huesos; hasta 2017, solo habían sido identificados mil 738 víctimas.