Por: Gerardo Avendaño

ENSENADA.- Empresas pesqueras de Ensenada pretenden consolidar a esta industria a través de la certificación de sus compañías y la implementación de procesos de calidad, que den valor agregado a sus productos, generando mejores ganancias y una mayor aportación a la economía nacional.

El vicepresidente del Consejo Mexicano de Promoción de los Productos Pesqueros y Acuícolas (Comepesca), Martín Gutiérrez García aseguró que el sector pesquero no está completamente representado en las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) que sólo considera una aportación del 1 por ciento al PIB nacional por parte de esta industria.

distribuidoras que generan mayor derrama económica y empleos.

“Empresas como ésta (Baja Marine Food) y las grandes empacadoras no las tienen contabilizadas ahí, cuando tu abres una empresa como ésta ni siquiera está el rubro en el SAT, sino te meten a un rubro que dice empresas varios.

“Nosotros calculamos que debemos de andar entre el cinco y el siete por ciento del PIB si metieran todo el sector, porque además la generación de empleos las dan estas plantas”, aseveró.

Explicó que dicha estimación se deba a que el INEGI únicamente registra el ingreso de los barcos que dan aviso de arribo en los puertos, además, afirmó el 80 por ciento de pescadores ribereños no da estos avisos.

“Los precios que pone INEGI son como de hace 10 o 20 años, la sardina la tenían a menos de un peso y ahorita la vendemos a más de 500 dólares la tonelada”, añadió.

Gutiérrez García comentó que la Cámara Nacional De Las Industrias Pesquera Y Acuícola (Canainpesca) genera alrededor de millón de empleos directos y entre cinco y siete indirectos.

Asentó que en Baja California, el sector pesquero aporta mayores ingresos que el turismo, asimismo, aporta al país variadas especies de pescados y mariscos, uno de los mayores atractivos para el turismo gastronómico.

“El turismo que viene a México, tanto extranjero como nacional, el 80 por ciento va a las playas de México. Su primer atractivo son sus playas, el agua, la naturaleza y el segundo gran atractivo es la comida, los pescados y mariscos”, apuntó.

Es por ello que las empresas pesqueras de la entidad mejoran sus procesos de producción y distribución para ofrecer la mercancía de mejor calidad, que ha dado como resultado que México tenga el 25 por ciento de su producción pesquera con una certificación basada en evaluación científica.

De acuerdo con información de la Comisión Nacional de Pesca y Acuacultura (Conapesca) el promedio mundial de empresas certificadas es de 12, lo que destaca al país en sustentabilidad de mares y protección de los recursos pesqueros.

Sin embargo, Martín Gutiérrez García, quien también es gerente de administración de la empresa empacadora y exportadora Baja Marine Food, manifestó que organizaciones ambientales han emprendido una campaña en contra de la pesca industrial en el Golfo de California, lanzando iniciativas para cerrar por completo el mar de esa zona a la actividad pesquera.

“Nosotros hemos estado peleando porque nos quieren sacar, lo hizo Semarnat, lo hacen sin pensar sin hacer las cosas, nos querían cerrar todo el golfo y luego todo el pacifico 50 millas afuera.

“Si nos sacan a 50 millas yo al otro día tendría que cerrar y decirle a la gente adiós y hay que liquidarla”, señaló.

Al respecto, Alfonso Rosiñol de Vecchi, presidente de la delegación estatal de la Canainpesca expuso que los pescadores tanto industriales como ribereños son los mejores aliados en la conservación de especies y ecosistemas, pues de eso dependen sus negocios.

“Nosotros como industrias pesqueras no estamos peleados con las Áreas Naturales Protegidas porque sabemos lo valiosas que son, cuando son determinadas de la manera correcta.

“Los que mejor vamos a cuidar el recurso somos los pescadores porque nuestras inversiones lo demandan, dicen los ambientalistas, ‘los grandes depredadores industriales que quieren acabar con el pescado´, por qué voy querer acabar con el pescado, si es de donde yo vivo”, declaró.

Alfonso Rosiñol de Vecchi es consejero delegado de Grupo Mar que involucra marcas como Atún Tuny y Oceano Industrial, actualmente están incursionando en el mercado de sardina, con el objetivo de aumentar el consumo de este producto en México.

Precisó que la sardina como todas las especies que se pescan en México cuenta con un plan de manejo con acciones de sustentabilidad que incluyen cuotas de captura, vedas y pesca por tallas.

“Somos los principales interesados en que se sigan los planes de manejo e establecer mayores condiciones si tenemos que establecerlas. La sardina no tiene un periodo donde se reproduzca lo hace varias veces durante el año, pero estamos viendo nosotros de establecer una autoveda para cuidar todavía más”, puntualizó.

Indicó que en las zonas de Guaymas en Sonora; Mazatlán, Sinaloa; San Carlos, Baja California Sur y Ensenada, Baja California se capturan 600 mil toneladas anuales de sardina, de los cuales la entidad aporta de 15 a 20 por ciento,nivel de participación en el mercado de la sardina, “es un reto difícil porque una marca establecida tiene ya su propia inercia y nosotros tenemos que incursionar de manera nueva pero si creemos que podemos ser unos actores importantes porque estamos haciendo un sardina de primera calidad”, señaló.

Los productos que generan los exportan a Asia, principalmente a China, Malasia, Tailandia, Vietnam, Corea y Japón, además de Estados Unidos, no obstante, pretenden incrementar el consumo nacional. “Queremos que vuelvan a abrir una lata y se den cuenta de lo sabroso y atractivo que es comer la sardina”, aseguró.

En este sentido, Minerva Pérez Castro, directora general de la empresa Atenea en el Mar, enfatizó en que Baja California cuenta con la mayor cantidad de áreas certificadas, donde además de productos de mar altamente solicitados, también aprovechan especies de recién descubrimiento como la almeja generosa.

“Nosotros tenemos un polígono, es un área en la que nada más nosotros podemos pescar y que tenemos que cuidarlo, nos la certificaron en 2010 después de dos años de proceso y en eso momento nos dimos cuenta de que tenemos un producto certificado pero no había el vehículo que pudiera poner ese producto en los mercados”, expresó.

La almeja generosa es una especie que fue descubierta en el 2001 y que habita entre los 18 y 20 metros de profundidad. Está enterrada por lo que se requiere de buzos para recolectarla.

“Al principio no existían permisos comerciales únicamente fomentos para su investigación en los que se tenían que hacer un reporte anual del ciclo de la especie”, comentó.

Hoy en día a nivel nacional distribuyen una tonelada de esta especie “lo cual, de un producto no tan común que no es fácil de conservar de manejar, es bastante”.

Pero en la planta de Atenea en el Mar procesan almeja mantequilla, almeja chocolate, ostión, abulón de cultivo, langosta y pescados varios, de los cuales exportan más de 400 toneladas anuales, el 90 por ciento se envía China y el otro 10 por ciento a Estados Unidos.

La empresa cuenta con 10 embarcaciones y 34 personas que trabajan en el campo de cultivo de la almeja generosa, el cual cuenta con almacenes, paneles solares, dormitorios, un taller y lugar para estacionar las embarcaciones.

Pérez Castro comentó que sus principales obstáculos en la expansión de su negocio han sido las regulaciones de cada país y apuntó que México también debe mejorar en las reglas tanto de exportación como de importación para beneficiar a este tipo de empresas.

“Ha aumentado el consumo en el mercado nacional gracias a organismos como Comepesca que está haciendo su labor de promoción y también a este boom que hay de los chefs y la cuestión gourmet, ha incrementado mucho”, aseguró.