Dicho nosocomio que despresurizará el Hospital General de Tijuana, fue edificado desde la administración estatal pasada. Ahora que el gobernador Francisco Vega de Lamadrid está en la recta final de su gobierno, por fin será puesto en marcha.

Redacción/HIPTEX

TIJUANA.- Por fin, el Hospital Materno Infantil de Tijuana, construído desde la administración estatal pasada, tiene fecha de puesta en marcha. El mes próximo iniciará operaciones de acuerdo a lo declarado por Guillermo Trejo Dozal, secretario de Salud en Baja California.

Así lo anticipó el funcionario estatal ante diputados del Congreso del Estado, durante su comparecencia como parte de la Glosa del V Informe del gobernador Francisco Vega de Lamadrid.

Ante la Comisión de Salud presidida por Miguel Antonio Osuna Millán, hermano del exgobernador José Guadalupe Osuna Millán, bajo cuya administración se ejecutó la obra de dicho hospital, señaló que tras una inversión final de 374 millones de pesos, funcionará en octubre.

La operación de este nosocomio diseñado para 60 camas y que despresurizará la demanda del Hospital General de Tijuana, que destina el 60 por ciento de su capacidad operativa a la atención de partos, se fue postergando a lo largo de la presente administración estatal.

Desde abril de 2016, el gobernador Francisco Vega de Lamadrid anunció la asignación de 160 millones de pesos para el equipamiento de esas instalaciones médicas, como parte de la bolsa de 660 millones en recursos extraordinarios aprobados por la federación para Baja California en ese entonces.

Sin embargo, la contratación de personal también versó siempre como tema pendiente para la puesta en marcha de la infraestructura médica ubicada en la tercera etapa del Río Tijuana.

No es la primera vez que Trejo Dozal anuncia la puesta en marcha del Hospital Materno Infantil, en diciembre de 2016, anticipó también que a finales de 2017 se echaría a andar y ese mes se definiría si se trataba de una asociación público privada o una dependiente directamente de la Secretaría de Salud.

Entonces existía “en obra negra”, ya estaba aprobado el equipamiento por 127 millones de pesos y no por 160, como había dicho el gobernador, pero faltaba la definición de la contratación del personal. (lgs)