Afirma que gobiernos anteriores de Morelos le dieron el control de la entidad a cinco grupos delictivos, lo que se logró revertir.

CUERNAVACA.- Gobiernos anteriores de Morelos le dieron el control de la entidad a cinco grupos delictivos que tenían un nivel de fortaleza e impunidad que se les logró arrebatar.

En ese sentido se despidió Alberto Capella Ibarra de su cargo como comisionado estatal de Seguridad en Morelos, después de presentar su renuncia ante el gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu, a quien elogió en reiteradas ocasiones mediante un video y de quien recibió los mismos tratos en un mensaje vía redes sociales.

Capella Ibarra se va del puesto que ocupó durante 4 años y medio, tan sólo dos semanas antes de que concluya el mandato de su jefe, Ramírez Garrido Abreu y tome posesión como gobernador el ex futbolista y ex primer edil de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, con quien mantiene diferencias desde 2015, cuando  ambos se lanzaron amenazas ante su incapacidad de ponerse de acuerdo en temas de seguridad, como el Mando Único.

“Le quitamos ese nivel de impunidad y fortaleza que tenían particularmente cinco grupos delictivos que tenían prácticamente el control gracias a los gobiernos anteriores de esta entidad", expresó en el video de poco más de dos minutos.

Además, aseguró que durante su gestión, apoyada con el “liderazgo” de Graco Ramírez, se redujeron de manera sustancial delitos de alto impacto. También, "le devolvimos a las familias de clase media la tranquilidad de no verse inmersas en temas de secuestro”.




Calificó de ingratas las percepciones que no ven los avances en el tema de seguridad en Morelos.

"Sé que no ha sido una jornada fácil, sé que ha sido sumamente ingrato muchas visiones y algunas percepciones, en algunas partes del Estado, que se tienen sobre el esfuerzo que se ha venido desarrollando. Pero tengo la plena convicción de que la historia nos juzgará en la medida de la objetividad que se merece el liderazgo de Graco Ramírez en este importante esfuerzo que ha hecho por recuperar la paz y la tranquilidad en el estado de Morelos", indicó Capella Ibarra.

Afirmó que se va con la tranquilidad “del deber cumplido” y se dijo convencido de que "gracias al liderazgo de Graco Ramírez se han sentado las bases y los cimientos adecuados para que la tranquilidad de esta entidad sea una realidad y una constante".

Durante las dos semanas que restan a la actual administración estatal en Morelos, ejercerá el cargo de comisionado de Seguridad, José Ortiz Guarneros.

Capella Ibarra inició su ejercicio como funcionario de Seguridad en Tijuana, cuando asumió el cargo de titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal al inicio de la alcaldía de Jorge Ramos Hernández, durante el XIX Ayuntamiento, del que salió al poco tiempo para que asumiera el teniente coronel Julián Leyzaola Pérez.

En el XX Ayuntamiento, repitió con el priísta Carlos Bustamante Anchondo, pero tampoco durante toda la gestión. Antes, fue presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad Pública en Baja California.

Ostentaba ese cargo cuando el 27 de noviembre de 2007, denunció en una conferencia de prensa que causó mucha suspicacia, que un comando armado atacó a balazos su casa y afirmó que él tuvo que repeler el ataque con un arma larga que uno de sus escoltas había olvidado y nunca recibió apoyo de agentes municipales o ministeriales. El hecho de un posible montaje le valió apodos.