Redacción/ HIPTEX

CIUDAD DE MÉXICO.- Siempre he actuado guiado por principios y soy perseverante, ninguna tentación desviará mi camino; no le voy a fallar a los ciudadanos, cumpliré mis compromisos y seré fiel a la voluntad del único que manda, el pueblo de México.

Contamos con amplias bases de legitimidad para hacer realidad el deseo colectivo de vivir en paz, con justicia y libertad. “El Poder Ejecutivo no será más el poder de los poderes, ni buscará someter a otros poderes”.

En ese sentido se refirió a los mexicanos Andrés Manuel López Obrador en su primer discurso como presidente electo tras recibir constancia de mayoría, con la que es avalado por unanimidad en el cargo de presidente electo de la República por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Esta tarde, tras la Sesión Pública en la que los magistrados de Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación declararon que la calificación de la elección para presidente de México le otorga legitimidad en el cargo, López Obrador recibió constancia de mayoría como presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos de manos de Janine M. Otálora Malassis, magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Será presidente de México desde el primero de diciembre de 2018 y hasta 2024 y desde el primer acto posterior a recibir el documento, exclamó tres veces ¡Viva México!, y habló de la cuarta transformación de la vida pública del país.

Actuaré con rectitud y con respeto a las potestades y soberanía de los otros poderes legalmente constituidos. Ofrezco a magistrados, Poder Judicial, legisladores y todos los integrantes de las entidades autónomas del Estado Mexicano absoluto respeto por sus veredictos.

El Poder Ejecutivo no será más el poder de los poderes, ni buscará someter a otros poderes, cada quien en el ámbito de su competencia fortalecerá la República y el Estado democrático de derecho transitará del ideal a la realidad, agregó.

El pueblo soberano está por encima de individuos, grupos o fracciones, declaró.

La gente votó por un gobierno honrado y justo. La mayoría de los ciudadanos están hartos de la prepotencia, influyentismo, deshonestidad, ineficiencia y desean con toda el alma poner fin a la corrupción e impunidad.

Aspiran a vivir en una sociedad mejor, sin la monstruosa desigualdad económica y social que padecemos.

López Obrador habló de dar preferencia a los olvidados y más pobres de México.

Otro de los mandatos de la mayoría es atender la violencia atendido las causas y reformular la política de seguridad hoy centrada, casi exclusivamente, en el uso de la fuerza, asentó.

La gente votó para que exista en México un verdadero Estado de Derecho, no quiere la simulación en la aplicación de la ley existida desde el porfiriato. Desea que se ponga fin a los fraudes electorales e igual castigo para delincuentes comunes y de cuello blanco.

Expresó que no se pueden desaprovechar condiciones políticas inmejorables para llevar a cabo la cuarta transformación de la vida pública de México.

Al iniciar su discurso, López Obrador recordó a dirigentes sociales y políticos precursores “de este movimiento”, porque ellos contribuyeron a que se hiciera realidad esta transformación en nuestro país. El inicio de un proceso de cambio verdadero.

“Muchos que se nos adelantaron y están seguramente muy contentos en la gloria, porque el infierno no existe, menos para gente que lucha por la justicia”.

Participo con entusiasmo y solemnidad en este importante acto en el cual el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación me ha entregado la constancia que me acredita como presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos.

Rindo homenaje al pueblo de México por su evidente vocación democrática. Agradezco a quienes depositaron en mí su confianza y reconozco la madurez política de quienes aceptaron los resultados.

No cabe duda que vivimos momentos estelares, dijo, verdaderamente históricos. Muchas han sido las enseñanzas del pasado proceso electoral, pero su saldo más importante fue la sólida dignidad republicana y conciencia cívica que hemos alcanzado los mexicanos y otros pueblos han reconocido.

Corresponde asimilar los sentimientos expresados por el pueblo al sufragar y ejecutar fielmente el mandato, mencionó.

Sonriente, tras su participación y recibir felicitaciones de los magistrados, López Obrador regresó a la primera fila del recinto electoral judicial con la constancia de mayoría bajo el brazo.

Antes de entregar el documento, Janine M. Otálora Malassis, magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación expresó que el fin último no es tener una democracia como estructura jurídica sino como sistema de vida.

Dio fe de que el pasado proceso electoral se desarrolló con apego a los principios constitucionales y materializa la investidura del titular del Poder Ejecutivo en Andrés Manuel López Obrador, que tomará protesta el primero de diciembre ante el Congreso de la Unión.

El sistema electoral, integrado por normas y órganos administrativos y judiciales, gira en torno al poder del voto ciudadano y el compromiso que genera ser votado.

Garantizamos la legitimidad de las elecciones y autoridades electas; en un contexto de violencia el proceso se realizó en apego a la ley.

La calidad de un proceso electivo es producto de la corresponsabilidad de sus integrantes. El momento en que un ciudadano emite su voto es el único en el que todos somos iguales, expresó. (lgs)

-Nota redactada a partir de la transmisión en vivo, en línea, de la sesión pública de entrega de constancia de mayoría como presidente electo a Andrés Manuel López Obrador por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.