En la audiencia del exprocurador general de la República, José Murillo Karam, se le vinculó en la elaboración de la narrativa de los hechos sobre la desaparición de los 43 estudiantes de la normal de Oaxaca
CIUDAD DE MÉXICO.- El secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, ayudó a fraguar la ‘Verdad Histórica’, según sostuvo la Fiscalía General de la República (FGR).
Organizados por el exprocurador general de la República, Jesús Murillo Karam, un conclave de funcionarios de alto nivel, entre los que se encontraba García Harfuch, habría creado la ‘Verdad Histórica’ para dar una respuesta a la población sobre lo que sucedió con los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa.
Durante la imputación del delito de tortura durante la audiencia de Murillo Karam, la FGR aseguró que García Harfuch, quien en ese momento era coordinador Estatal de la policía Federal en Guerrero, se reunió con Tomas Zerón de Lucio, entonces director de la Agencia de Investigación Criminal, y el exprocurador.
En 2016, Harfuch fue designado como titular de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR.
Sin embargo, el funcionario ha reiterado que cuando sucedió la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, él se encontraba destacamentado en Michoacán, como parte de la Policía Federal y negó que hubiera sido mando en Guerrero.
Incluso, en una entrevista dijo: “Es importante precisar que cuando suceden esos hechos, es importante decir donde estaba yo. Yo estaba en Michoacán, exactamente en Buenavista, Tomatlán y en Nueva Italia, Michoacán. Yo no estaba en Guerrero, si hubiera estado en Guerrero, por supuesto salir a asumir y dices ‘mes hago responsable de la Policía Federal’”, dijo.
Este Sábado 20 de Agosto, la Fiscalía General de la República (FGR) acusó al exprocurador general, Jesús Murillo Karam, de presentar pruebas falsas para construir
La llamada “verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
En la audiencia celebrada en el Reclusorio Norte, Murillo Karam está siendo acusado de haber cometido actos de tortura contra seis personas relacionadas con el caso, actos que se utilizaron para construir la versión defendida por la extinta Procuraduría General de Justicia.
