Baja California registra la peor calidad de empleo de su historia, de acuerdo a datos del INEGI y el IMSS tiene la peor calidad de empleo de su historia, sostiene el presidente del Centro de Estudios Económicos de la entidad, Luis Roberto Valero
TIJUANA.- Baja California registra la peor calidad de empleo de su historia, de acuerdo a datos del INEGI y el IMSS, afirmó este viernes el presidente del Centro de Estudios Económicos de la entidad, Luis Roberto Valero Berrospe.
Indicó que el estado no solamente no logró reponerse de la crisis del 2008, sino que es un hecho que desde el 2019 sus indicadores de empleo colapsaron, “debido a un pésimo manejo de la economía estatal y el golpe de la pandemia”.
También manifestó que debido al poderoso crecimiento que tuvo Baja California en los 90´s es necio compararnos hoy con otros estados, pues hace dos décadas la oferta de empleo superó a la Población Económicamente Activa, el salario estaba por encima de la media nacional, la economía crecía hasta un monumental 12.9% anual y la entidad era líder nacional en niveles salariales.
Valero Berrospe sostuvo que en el 2022 la calidad del ingreso registra una caída libre, pues el IMSS documenta para junio una contracción del salario promedio de cotización del 0.34% para colocarse en 521.79 pesos diarios, es decir, una cifra ligeramente superior a los 2 Salarios Mínimos diarios (520.68 pesos por día).
Salvo San Quintín –enfatizó–, “que registra un salario de vergüenza”, que apenas avanzó 0.88% para colocarse en 311.24 pesos, el resto de los municipios presentó un retroceso, lo cual se entiende en el contexto del escandaloso crecimiento récord de los ocupados con 2 Salarios Mínimos en el estado.
El presidente del CEEBC añadió que a la pobre oferta salarial en el estado se suma el impacto de la inflación, lo cual se ve en los datos del Banco de México que reporta que en junio sumaron 11 meses con disminución real en los salarios contractuales. En junio la caída fue 2.9% anual real, es decir, descontada la inflación.
Asimismo, subrayó, debido a los efectos del estancamiento económico de la entidad, muchas empresas, a fin de cumplir con el alza obligada al Salario Mínimo, han retirado prestaciones a los empleados.
En este año la precarización salarial alcanzó niveles realmente alarmantes, dijo; los datos de empleo del IMSS presentan que los ocupados con hasta 2 Salarios Mínimos aumentaron para junio en más de 14 mil. El acumulado enero-junio registra 89 mil 466 nuevos empleos de 2 SM, lo cual representa un nuevo récord, en tanto que los otros niveles se redujeron; lo más delicado de esto es que los datos del IMSS miden solamente el empleo formal.
Luis Roberto Valero Berrospe sostuvo que durante muchos años se presumió que en Baja California nadie ganaba el Salario Mínimo, y hoy “es una realidad que inquieta”. El INEGI –dijo– documenta que el grupo de más de 5 Salarios Mínimos se encogió a niveles históricos, y lo más preocupante es que esto se acentuó a partir del cuarto trimestre del 2018; los empleos de 1 SM se dispararon 387% en tanto que los ocupados con más de 5 SM decrecieron 80%.
Aclaró por otra parte que la calidad del empleo debe considerar, además del sueldo, prestaciones como el acceso a seguridad social, y en Baja California los ocupados sin prestaciones han crecido hasta alcanzar un máximo histórico en 751 mil 448 este año.
También se refirió a “la población desocupada encubierta” y dijo que con empleo de calidad las cifras de este rubro serían mínimas, como hace veinte años que apenas rondaban los 20 mil; hoy sin embargo los trabajadores que salieron del mercado porque no les ofrecieron un empleo acorde a sus necesidades, particularmente un buen salario, aumentaron en más de 106 mil individuos.
El especialista señaló que el mismo gobierno de la entidad reconoce la mala calidad del empleo; en su diagnóstico de la Política de Desarrollo Empresarial –dijo–, presenta un entorno económico preocupante, pues destaca la reducción de los ingresos, la desigualdad salarial y el aumento de la pobreza, “elementos que confirman la pésima calidad del empleo”.
En el Plan de Desarrollo el Estado reconoce que “Baja California es de los estados con mayor desigualdad salarial”; entre las 10 problemáticas económicas detectadas señala“…la reducción de los ingresos y del poder adquisitivo… un empobrecimiento de los ingresos de los trabajadores (pues) entre 2019 y 2021 disminuyó la proporción de empleos con más de cinco salarios mínimos diarios... también, con el aumento tanto de la inflación como de los empleos que pagan hasta tres salarios mínimos, se ha profundizado la pérdida de los niveles de ingreso en la población…”
“…la desigualdad salarial y aumento de la pobreza ya que –acepta el gobierno de Marina del Pilar– Baja California es de los estados con mayor desigualdad salarial, y en 2021 fue el tercer Estado con mayor desigualdad, medida como el cociente entre personas que ganan hasta dos salarios mínimos y las personas que ganan más.”
“Entre 2019 y 2021 se triplicaron las personas que ingresan menos de cinco salarios mínimos. La mayoría de éstas gana dos salarios mínimos diarios, es decir, del orden de 420 pesos mexicanos, se trata del 43% de los empleados”.
Por último Luis Roberto Valero Berrospe advirtió que los políticos que están en la administración estatal deben dejar de estar buscando la comparación con otras entidades; “Baja California era referente nacional y mundial hace dos décadas y ese debe ser el objetivo a lograr. Entonces apenas el 0.2% de la población estaba en pobreza alimentaria, y era el segundo menor porcentaje nacional”, finalizó.