Buscan conocer el motivo que llevó a Matthew Taylor Coleman, de 40 años, residente de Santa Bárbara, a asesinar a sus dos pequeños hijos en un camino vecinal de Playas de Rosarito
TIJUANA.- El Buró Federal de Investigaciones (FBI) ha asumido, del lado de Estados Unidos, el caso de Matthew Taylor Coleman, de 40 años, residente de Santa Bárbara, acusado por la Fiscalía de Baja California de ser el presunto responsable del homicidio de sus dos pequeños hijos.
Luego de ser detenido por agentes de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) mientras cruzaba a Estados Unidos desde México en el puesto de control de San Ysidro, Matthew Taylor Coleman quedó bajo custodia federal, cuando intentó escapar tras cometer el doble homicidio en Playas de Rosarito.
Matthew Taylor Coleman fue identificado como entrenador y copropietario de Lovewater Surf Co., una escuela de surf con sede en Santa Bárbara, donde nació.
Taylor obtuvo una maestría en español en la Universidad de California Santa Barbara; por lo publicado por las redes sociales de la escuela de surf, ésta estaba dedicada mayoritariamente a menores de edad.
También se ha informado que Matthew Taylor Coleman completó sus estudios en la Universidad Point Loma Nazarene en San Diego, en donde formó parte del equipo de surf.
Desde el sábado 7 de agosto, el Departamento de Policía de Santa Bárbara había emitido una notificación de personas desaparecidas, luego que la esposa de Matthew Taylor Coleman hiciera la denuncia respectiva, preocupada por el bienestar de los menores.
Sin embargo, la Fiscalía de Baja California informó que no tuvo conocimiento de que se haya activado una Alerta Amber, un mecanismo que se activa ante la desaparición de menores de edad y que pueda estar en peligro su integridad física.
La Fiscalía de BC dijo que fue hasta este lunes, cuando se empezó a difundir el hallazgo de dos menores de edad muertos en un camino vecinal de Playas de Rosarito, que la policía de Santa Bárbara se puso en contacto con su similar del ese municipio de Baja California.
Fue así como se pudo establecer una coordinación para que agentes fronterizos detuviesen a Matthew Taylor Coleman en la garita de San Ysidro. Pero para entonces ya había quitado la vida a sus dos pequeños hijos, una de un año de edad y un niño de tres.
Debido a que el crimen de los menores ocurrió en el extranjero, el FBI es la agencia investigadora principal del caso en Estados Unidos, donde Matthew Taylor Coleman enfrenta una orden de aprehensión por el delito de secuestro de menores de edad.
El FBI está llevando a cabo una investigación conjunta en Los Ángeles y San Diego, con la Policía de Santa Bárbara, la Patrulla Fronteriza y de Aduanas de Estados Unidos, así como con las autoridades mexicanas.
De ser juzgado en México, luego de un proceso de extradición, Matthew Taylor Coleman pudiera enfrentar una condena de entre 60 y 90 años de prisión.
Pero también es posible que el presunto asesino sea juzgado en California, tanto por los delitos que enfrenta en aquel país como por el doble homicidio contra sus hijos cometido en territorio mexicano.
El crimen de los niños, agredidos con un estaca de madera en repetidas ocasiones, y luego sus cuerpos abandonados entre matorrales en las inmediaciones de un rancho en Playas de Rosarito ha generado un profundo malestar en ambos lados de la frontera y la exigencia de justicia, así como determinar el móvil que llevó a Matthew Taylor Coleman a asesinar a sus hijos.