Testimonio integro de Ana Lilia Castro Cervera, tía de Karen Castro, mujer desaparecida el pasado 7 de diciembre y encontrada sin vida el 10 del mismo mes, en la ciudad de Ensenada.

"Nosotros estamos en la marcha para hacerle la petición a las autoridades que se esclarezca el crimen de mi sobrina, pues no tenemos causa de muerte, ni tenemos fecha de muerte".

"Según la autopsia no reveló nada y pues estamos muy incrédulos, y lo que queremos es justicia, además de que ya no pasen estas cosas. Ensenada está muy inseguro, sale uno a las calles y tiene miedo, no sólo peligro a las mujeres, sino también hombres y niños".

"Hasta ahorita no hay ninguna línea de investigación, no nos han dicho nada las autoridades, según que van a seguir investigando, pero lo que nos sorprende a nosotros, es que no hay causa de muerte, aparte que no sabemos la fecha de su fallecimiento, el certificado de defunción no dice nada". 

LO QUE OCURRIO A PARTIR DEL DIA QUE HALLARON EL CUERPO 

“El 10 de diciembre nos avisan que encontraron el cuerpo de una mujer en el arroyo ‘El Gallo’, inmediatamente nosotros nos dirigimos a SEMEFO; cuando llegamos, el médico que nos atendió nos dice que sí habían encontrado a una mujer muerta, por lo que les pedimos las características y les decimos que tenemos una sobrina desaparecida". 

"Él nos dice que es una mujer de aproximadamente 1.73 M de estatura, cabello rojo, con estrías en su estómago. Yo le comento que mi sobrina es de tez blanca y cabello negro, pero el médico nos dice que no". 

"Yo le pedí que nos dejara ver el cuerpo y me dice que no, porque estaba en estado de descomposición, y que por medio de una foto la podríamos identificar. Nos trae una foto oscura que no se distingue nada. Entonces me acordé que ella tenía una cirugía de salpingo, él va a revisar, regresa y dice que no tiene ninguna cirugía, sus trompas están separadas, no tiene indicio de cirugía, por lo que dijimos que no es, y nos fuimos". 

"A mí me entraron dudas después, porque coincidía la ropa, entonces volvemos a ir a SEMEFO y nos atiende otro médico, le preguntamos de nuevo, pero no nos quiso dar más información, sólo nos vuelven a decir lo mismo, cabello rojo, estatura de 1.70 M, pero nos dice que era de raza negra, entonces dijimos que no es Karen". 

"Para eso, a mi cuñado le hablan para hacerle la prueba de ADN y el día 2 de enero llegaron los resultados de que la prueba era positiva, que era Karen, pero nosotros teníamos dudas de que fuera ella por todo lo que nos habían dicho, yo se lo dije al MP y en ese rato nos muestra las fotos de cuando la encontraron y cuando las vimos, yo lueguito la reconocí, era ella, y el pelo lo tenía negro". 

"Entonces yo le pregunto al MP por que no dijeron que tenía el cabello rojo, nos dice que con el agua se decolora etc.".  

"No quisimos aceptar que era ella. Se hicieron otros estudios y nos los entregaron el día 17 de enero, confirmando que era ella". 

"Después de eso, sólo imaginen el dolor tan grande de saber que haya estado tanto tiempo ahí en SEMEFO en calidad de desconocida. Ha sido para la familia muy duro, muy difícil, ya era más de un mes de mucha incertidumbre, de mucho dolor, de no dormir, de ver a los niños que lloraban y preguntaban por su mamá y no saber qué decirles". 

"Lamentablemente no ha habido eco en las autoridades, se supone que están enterados de esto porque se hizo viral, hasta nivel internacional, y ellos mudos, sordos, en este caso no hemos tenido ninguna palabra de las autoridades".  

"Desgraciadamente hay muchas muchachas desaparecidas y esto (la marcha) nosotros lo hacemos como familia por Karen, pero también en nombre de todas las mujeres que están desaparecidas". 

"Le pido a las autoridades que hagan su trabajo como debe ser y le pongan ganas, porque no se ve mucho empeño”. 

HABLó LA ABUELITA DE KAREN 

“Hay mucha incertidumbre y mucho dolor por que me duele en el alma, en el corazón. Lo tengo destrozado, porque ella no merecía eso, y los que hicieron eso andan libres, quiero que haya justicia, que no quede impune esto porque ella deja a sus tres criaturas que están muy chiquitas. Nosotros como abuelos, le pido a Dios que ardan en el infierno los que le hicieron esto”.