Lucía Gómez Sánchez/ HIPTEX

TIJUANA.- En estos momentos matan mil personas más que las que asesinaban hace 10 años en Tijuana en un periodo de seis meses.

A esa conclusión se llega si se contrastan las estadísticas de homicidios del primer semestre de 2019 con las de igual periodo de 2009, año que en su momento pasó a la historia como uno de los del trienio más violento en la ciudad.

De 2008 a 2010 Tijuana vivió un incremento sustancial en la violencia y los homicidios, que fueron 577, 557 y 688 en cada año, respectivamente.

Con mil 340 muertes violentas registradas en Tijuana durante el primer semestre de 2019, la cantidad semestral es 301 por ciento mayor que los 334 homicidios del primer semestre de 2009, destaca el comparativo primer semestre 2009-2018 frente enero-julio 2019 proporcionado por el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California.

Duplica y sobra la anual de 2008-2010 en los dos primeros años en contraste y casi es el doble también de las de 2010, de acuerdo a cifras oficiales de incidencia delictiva registrada ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) concentrada por la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.

Así, en la mitad del tiempo ahora se tienen el doble de ejecuciones, con todo lo que ello implica para la dinámica social, aunque a la autoridad le baste con relacionar al narcomenudeo más del 90 por ciento de los casos.

Si se toma como base el comparativo primer semestre 2009-2018 frente enero-julio 2019 proporcionado por el Consejo Ciudadano de Seguridad Pública de Baja California, puede señalarse que durante el primer semestre de 2012 hubo 501 por ciento menos homicidios que los registrados en igual periodo de 2019.

En ese semestre sucedieron en Tijuana 223 homicidios frente a los mil 430 de los primeros seis meses de 2019; es decir, con 232 muertes violentas en julio de 2019, sólo ese mes superó todas las cometidas en el primer semestre de 2012 en el municipio. Enero de 2019 estuvo cerca, con 220.

Como lo mencionó HIPTEX en una nota previa, esos asesinatos que la autoridad relaciona al narcomenudeo han comenzado a ocurrir a todas horas del día y en sitios públicos en la ciudad.

Las muertes violentas ya no se tratan sólo de ejecuciones en construcciones abandonadas o ataques directos casi siempre nocturnos, tampoco se circunscriben sólo al abandono de cadáveres mutilados, calcinados o putrefactos en caminos solitarios.

Ahora los homicidios se vuelven hacia las ejecuciones en sitios públicos a cualquier hora y sin importar la presencia de testigos. Están ocurriendo en plazas públicas y todo giro de negocios, desde bares y restaurantes hasta gasolineras.

Los homicidios en Tijuana comenzaron a repuntar en 2016 y alcanzaron su clímax en 2018, con 2 mil 519 en el año y mil 454 en el primer semestre, cuando se registraron 8 por ciento menos muertes violentas que en el primer semestre de este año. (lgs)