Redacción/ HIPTEX

TIJUANA.- En no más dos semanas funcionará el albergue para migrantes centroamericanos retornados de Estados Unidos para que esperen en México su respuesta a asilo político en ese país.

Muy probablemente funcionará en el espacio anunciado del swap meet Insurgentes, ubicado entre bulevar Insurgentes y Bernardo O’ Higgins y por el que no se pagará renta a los propietarios, sino que se tratará de un préstamo del espacio con capacidad de 4 mil personas.

Así lo anticipó este jueves en conferencia de prensa Jesús Alejandro Ruiz Uribe, delegado único del gobierno federal en Baja California.

Reconoció que los albergues de las asociaciones civiles se encuentran repletos y el del gobierno federal funcionará por compromiso presidencial.

El año pasado, subrayó, fueron retornados por Tijuana 63 mil mexicanos y extranjeros; este año, por el acuerdo de retorno de centroamericanos entre gobiernos de Estados Unidos y México, hay excedente de tres mil personas que se enfrenta gracias a que “Tijuana es una ciudad económicamente poderosa”.

Los números los ha absorbido la ciudad, algunos se van, otros residen con visa de trabajo, lo que despresuriza la necesidad del albergue, pero es un compromiso presidencial, acotó Ruiz Uribe.

Indicó que hay muchas posibilidades de que el albergue se instale en el lugar que se ha estado manejando, pero no es seguro porque buscan el espacio idóneo. Funcionarios federales han visitado las instalaciones y el previsto es el que está en primer lugar.

Planteó que el de centroamericanos retornados es un fenómeno distinto al de la caravana migrante, integrada por personas que trataban de buscar la apertura masiva de puertas en Estados Unidos, sin intenciones de quedarse en México.

Ahora vienen con paciencia, un trámite de asilo en Estados Unidos  y con fecha para acudir a cita y se quedan con oportunidad de trabajar.

“Saben que gobierno federal está concentrado en generar las mejores condiciones para su trato como hermanos centroamericanos”, sostuvo.

Dijo que eso es lo que debe tomar en cuenta el Consejo de Seguridad Escolar del tercera etapa del Río, quien mostró preocupación por la posibilidad de apertura del albergue en lo que antes fue un tianguis entre Insurgentes y Bernardo O’ Higgins.

No es postura anti inmigrante, aclaró, se ha establecido comunicación con la organización que representa a unos 15 mil estudiantes y se les han planteado que las condiciones de salubridad están garantizadas, así como la nueva realidad que enfrenta la población a resguardarse en el sitio, muy distinta a la de la caravana. (lgs)