El padre Alejandro Solalinde sostuvo que la política del presidente de los Estados Unidos no variará hasta que sea reelecto o pierda
BERLÍN, ALEMANIA.- Donald Trump no va a dejar de presionar a México hasta que gane o pierda las elecciones, afirmó el sacerdote católico Alejandro Solalinde, quien agregó que los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos a través de suelo mexicano "van a seguir pasando".
Además, estableció: "Y quién tiene la autoridad y el poder para decir quién pasa y quién no, en las dos fronteras, no son los gobiernos de Estados Unidos y de México, sino el crimen organizado. Ellos son los que controlan las fronteras. Así de fácil".
El fundador del albergue de migrantes Hermanos en el Camino, con sede en la sureña ciudad oaxaqueña de Ixtepec, advirtió también que "Donald Trump es muy voluble. No hay que fiarse de sus amenazas ni de sus promesas, porque es una persona que cambia constantemente".
Solalinde fue uno de los oradores el pasado sábado en Tijuana en el acto Unidad en Defensa de la Dignidad de México y en Favor de la Amistad con el Pueblo de los Estados Unidos, que encabezó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Esa actividad siguió al acuerdo alcanzado un día antes por los gobiernos de México y Estados Unidos, el cual evitó la imposición de aranceles a importaciones mexicanas a su vecino del norte, además del compromiso de abatir el paso de la migración sin documentos con el mismo destino.
En sus declaraciones a la Deutsche Welle, reconoció la existencia de traficantes de personas y pandilleros en los flujos de migrantes, los cuales podrían sumarse a organizaciones como el cártel de Sinaloa.
Sin embargo, alertó que "es muy difícil" detener a traficantes de personas y pandilleros porque "el crimen organizado se encarga de pasarlos clandestinamente".
Más adelante, sobre el paso de migrantes sin documentos en general, en su mayoría centroamericanos, advirtió que "el crimen organizado es tan sofisticado, que puede pasarlos yo creo que hasta con submarinos".
Acerca del desánimo que puede imperar entre los migrantes debido al refuerzo de las medidas para contener su paso por México, Solalinde indicó: "Los migrantes tienen un chip. Y ese chip es ir al norte".
"Es cierto que ahora algunos de ellos, como ven difícil poder cruzar, están haciéndose a la idea de que pueden quedarse en México un tiempo, pero después lo van a intentar una y otra vez hasta que lo logren", dijo Solalinde
Una solución verdadera al problema migratorio, "a mediano y largo plazo, es el desarrollo de América Central. Ese es el camino correcto. Pero requiere tiempo y requiere financiamiento", concluyó.