Mi competencia ni la oigo ni la veo, resaltó, están tan intimidados nuestros contrincantes que ni siquiera salen. En mercados sobrerruedas los abuchean y los corren; es muy difícil para ellos hacer campaña porque son rechazados.

Redacción/ HIPTEX

TIJUANA.- La diferencia con su más cercano competidor es de 60 puntos porcentuales; su ventaja no es de 60 por ciento sino que goza de una diferencia de 60 puntos en contraste “al segundo lugar” del que al final de cuentas “nadie se acuerda”.

Así lo aclaró esta mañana Jaime Bonilla Valdez, candidato a la gubernatura de Tijuana por la coalición “Juntos Haremos Historia en Baja California” que encabeza Morena y que sólo agregó el “Baja California” al nombre de la que tuvo el año pasado la que llevó al triunfo electoral al ahora presidente de la República Andrés Manuel López Obrador.

El senador con licencia Bonilla Valdez acompañó a Arturo González Cruz, aspirante a la alcaldía de Tijuana por la misma fórmula, a su primera conferencia de prensa como candidato en campaña.

No fue difícil que el candidato a gobernador se convirtiera en el centro de las preguntas, a pesar de su calidad de acompañante.

“Si vemos los números, yo tengo los números donde estamos 60 puntos arriba; no tenemos 60 por ciento, tenemos 60 puntos más de diferencia entre el segundo lugar”, recalcó.

Mi competencia ni la oigo ni la veo, resaltó, están tan intimidados nuestros contrincantes que ni siquiera salen. En mercados sobrerruedas los abuchean y los corren; es muy difícil para ellos hacer campaña porque son rechazados.

Es una carrera estéril y por eso se basa en la guerra sucia. Nadie se acuerda del segundo lugar, va a ser nada más consolación para ellos.





Descartó ser un freno para la llegada de recursos para Baja California. El gobernador, dijo refiriéndose a Francisco Vega de Lamadrid, solito puede truncar los recursos; no necesita ayuda de nadie, sabe cómo ir por los dineros, cómo gastar los dineros y cómo desviar los dineros, que alcanzan para tener en los bancos y casas millonarias.

También descalificó el discurso “antiinmigrante” del alcalde con licencia Juan Manuel Gastélum Buenrostro, quien busca reelegirse.

Pedía 80 millones de pesos “el bandido”, pedía para comida y la detenía en la línea, reprochó con referencia a la época de llegada a la ciudad de la Caravana Migrante de centroamericanos en los últimos meses de 2018, mientras él era coordinador de delegados federales en el Estado. (lgs)