TIJUANA.- Unos cincuenta colonos de Corona del Mar, asentamiento ubicado sobre el segundo acceso a Playas de Tijuana, fueron desalojados violentamente por agentes de la Policía Municipal en un operativo en la que igualmente fueron agredidos periodistas que cubrían los hechos.

Desde muy temprano, residentes de Corona del Mar se concentraron para impedir su desalojo por parte de agentes de la Policía Municipal en apoyo a un actuario que pretende ejecutar un fallo del Juzgado de Distrito.

La fuerte oposición de los colonos ha impedido que se lleve a cabo el desalojo, que se pretendió llevar a cabo desde hace un par de horas.

Los colonos, aseguran que han comprado sus predios de buena fe, desconociendo que estuvieran en litigio. 

Son más de 200 las familias afectadas con el fallo judicial que el gobierno municipal pretende ejecutar bajo las órdenes del Consejero Jurídico del Ayuntamiento y de una fuerza policiaca que suma más de 30 elementos.

Son cerca de 40 hectáreas las que están en disputa, y en el lugar se encuentran, además de los colonos, el representante legal de quien se ostenta como legítimo propietario y quienes se oponen al desalojo al considerar que el fallo judicial no les dio el derecho de audiencia.

Igualmente se encuentran representantes legales de Ricardo Castillo, a quien el Juzgado del Distrito favoreció con su fallo y reclama para sí la propiedad de los predios en la colonia Corona del Mar.

Colonos cuestionan el actuar de los funcionarios municipales a quienes acusan de entregar terrenos de esta colonia a favor de un particular, violando claramente diversas disposiciones a la Ley, ya que el inmueble ni siquiera está en poder del gobierno.

El operativo de desalojo tardó en llevarse a cabo porque el Consejero Jurídico no ha presentado el escrito dirigido al Secretario de Seguridad Pública Municipal para que sus oficiales pudieran ejecutar el fallo de desalojo ordenado por el juez de distrito.

Tras muchos alegatos, el Consejero Jurídico del Ayuntamiento ordenó ejecutar el operativo y la policía municipal procedió al desalojo de colonos, pero en el operativo arremetió contra varios reporteros. Uno de los colegas golpeado y detenido fue el reportero gráfico José Luis Camarillo.

El fotógrafo fue subido con violencia a una patrulla de la Policía Municipal a pesar de que durante su detención alegaba que era periodista y varios compañeros que cubrían los hechos abogaban por él.

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