Los derivados de estrógenos han mostrado eficiencia para tratar diversos padecimientos como la diabetes tipo 2, el síndrome metabólico, el Alzheimer y la enfermedad de Parkinson
Los derivados de estrógenos han mostrado eficiencia para tratar diversos padecimientos como la diabetes tipo 2, el síndrome metabólico, el Alzheimer y la enfermedad de Parkinson