El legendario actor británico, considerado uno de los mejores de su generación y ganador de tres premios Óscar, protagoniza el debut cinematográfico de su hijo Ronan Day-Lewis tras ocho años alejado de las pantallas
El legendario actor británico, considerado uno de los mejores de su generación y ganador de tres premios Óscar, protagoniza el debut cinematográfico de su hijo Ronan Day-Lewis tras ocho años alejado de las pantallas