Debido a los daños ecológicos en nuestro planeta, los casos de melanoma en el mundo se han incrementado hasta en un 500 por ciento, las últimas cuatro décadas.
En el marco del Día Mundial del melanoma, el especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Gustavo Vargas Ramírez, recomendó cuidarse del sol y vigilar cualquier lunar para prevenir la presencia de esta patología.
El dermatólogo adscrito al Hospital General Regional 110 y experto en Salud Pública, aseguró que la genética y la exposición solar excesiva y repetitiva son factores primordiales para el desarrollo de melanoma. Sin embargo, dijo que quienes residen en zonas costeras “tienen una piel aclimatada”.
Destacó que “este tipo de cáncer de piel se da más en personas que viajan, es decir las personas que tienen recursos para irse a la playa y a exponerse al sol con fines lúdicos, pero que no tiene acceso al mar, son quienes comúnmente abusan de la exposición al sol, los vacacionistas se divierten más poniéndose bajo el sol”.
Sobre la cuestión genética, mencionó que si existen antecedentes de melanoma en la familia se debe acudir lo más pronto posible con el especialista para descartar la presencia del mismo, e incluso niños pueden verse afectados con este tipo de cáncer.
“Si tienen ya quemaduras solares de la infancia, o más de 50 lunares en el cuerpo hay que estar vigilando constantemente a estas personas, puede haber niños ya con melanoma de nacimiento”, advirtió el especialista.
Vargas Ramírez puntualizó que el melanoma es más frecuente en personas de entre 30 y 50 años de edad, pero recalcó que a mayor edad, mayor riesgo, además hay una tendencia superior entre los varones en comparación con las mujeres.
“Todos los lunares pueden ser potencialmente malignos, y más cuando estamos en edad avanzada, porque los factores exponenciales del sol provocan que estos nevos o lunares se distorsionen con el tiempo”, detalló.
Resaló que si un lunar o nevo, con el tiempo presenta cambios en su coloración, tamaño, o forma, o incluso aparecen bordes irregulares o puntos dentro del mismo, pueden ser indicativos de la presencia del melanoma.
Vargas Ramírez, afirmó que debido a los daños ecológicos en nuestro planeta, los casos de melanoma en el mundo se han incrementado hasta en un 500 por ciento, las últimas cuatro décadas.
Señaló que nueve de cada 10 casos pueden llegar a ser curables si se realiza un diagnóstico e intervención muy precoz, aunque se trata de un cáncer muy agresivo y letal que puede ocasionar metástasis hacia otros órganos y tejidos.
Refirió que existen cuatro tipos de melanoma: el de extensión superficial que es el más frecuente, el nodular, el lentigo maligno y el lentiginoso acral.
En los varones es frecuente que las lesiones o lunares distorsionados aparezcan en el tórax, mientras que en las mujeres en extremidades superiores, apuntó.