El mandatario federal informó que ya se tiene a quien sustituirá a Martínez Cázares al frente del IMSS.
VERACRUZ.- El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó la renuncia de German Martínez Cázares como director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), y afirmó que cada quien puede tomar la decisión que más le convenga.
“Somos libres y cada quien puede tomar la decisión que más convenga y hay que trabajar con convicciones y estar a gusto, no se puede estar a disgusto, nada por la fuerza decía el presidente Juárez, todo por la razón y por el derecho”, expresó.
En entrevista a su llegada al aeropuerto internacional de Veracruz, el mandatario federal informó que ya se tiene a quien sustituirá a Martínez Cázares, “ya estamos pensando, afortunadamente hay un buen equipo de mujeres y hombres con convicciones y principios, gente honesta”, enfatizó en compañía del gobernador de la entidad, Cuitláhuac García.
El jefe del Ejecutivo federal lamentó la decisión de Martínez Cázares, pero insistió que afortunadamente hay muy buenos servidores públicos y pronto será sustituido. “Seguramente Germán regresa al Senado, y va a seguir manteniendo sus principios, vamos a que mejore el Seguro Social, que se acoplen, que Hacienda y el Seguro Social se pongan de acuerdo”.
Al preguntarle sobre si el hasta hoy titular del IMSS le avisó de su renuncia, López Obrador confirmó que tenía diferencias con Hacienda, y que hace unos días Germán Martínez le envió una carta para comunicarle su decisión.
Sobre el diferendo del extitular del Seguro Social con la Secretaría de Hacienda, el presidente destacó que la dependencia hacendaria tiene que participar en todo lo que corresponde al IMSS y al ISSSTE, al gobierno federal, aunque se trate de organismos descentralizados y autónomos.
“Soy muy ortodoxo, muy respetuoso de las decisiones que toma Hacienda”, planteó y comentó que la Secretaria tiene una política para que no haya déficit, es decir que no haya deuda y las finanzas estén sanas, esa es su función y “yo respaldo esa política”.
En este contexto, López Obrador descartó que estén en riesgo los servicios de salud, pues “es una institución que funciona y seguirá funcionando sin ningún problema”.
El mandatario dijo que Martínez Cázares quería tener más independencia en las decisiones en materia financiera, pero hay que apegarnos a lo que establece la dependencia federal, “todos, porque tiene que haber una administración sana y sin déficit”.
Expuso que el gobierno federal no se puede dejar intimidar por los proveedores, “había mucha corrupción en la compra de medicinas”, nada más en IMSS un proveedor abastecía la mitad de las medicinas que se usaban en el Instituto. “Claro que hay presiones, pero hay que resistirlas y no dejarse intimidar”.
Aseguró que quedó en buenos términos con Germán Martínez Cázares, “yo lo respeto mucho”, y agregó que aunque es la primera renuncia “van a haber otras”, al tiempo que soltó una carcajada.
Apenas esta mañana, Martínez Cázares señaló como " perniciosa injerencia que tienen algunos funcionarios de la Secretaría de Hacienda en el Instituto" y que ponen en riesgo la prestación de los servicios.
En su carta de renuncia en la que expone sus razones en 11 cuartillas, explicó que la dependencia maneja en sus servicios más de mil millones de pesos diarios, por lo que controlar en exceso esos recursos, sin racionalidad y sin apego a las normas, puede acabar con la vocación social del propio Instituto.
Señaló que el presidente Andrés Manuel López Obrador proclamó el fin del neoliberalismo, pero -agregó- en el Seguro Social la participación de Hacienda es neoliberal, al buscar solamente “ahorro y más ahorro, recortes de personal y más reportes de personal, y un rediseño institucional donde importa más el cargo que el encargo”.
Martínez Cázares destacó que el IMSS necesita una reforma para acoplarlo al sistema universal de salud y un modelo preventivo que atienda los factores sociales que afectan a los mexicanos, y no de una renovación ficticia.
“Algunos funcionarios de Hacienda intentan una remodelación cosmética del IMSS, donde por ejemplo, se pretende reformar el reglamento para colocar funcionarios administrativos en los estados desde la Secretaría de Hacienda, y así anular a los delegados que este Consejo Técnico aprobó”, puntualizó.
El ex titular de dicha dependencia manifestó que dicha secretaría federal busca nombrar, en todo el país, a una especie de delegados administrativos estatales, “fuera del Consejo Técnico para que sean ellos quienes en los hechos administren, desde lo local, al Seguro Social”.
Precisó que mientras se discute la remodelación del Instituto, muchos trabajadores están en incertidumbre laboral, otros sin contrato, mientras que algunas vacantes aumentan y el rezago en infraestructura es “brutal”.
Detalló que en 2019 prácticamente está en cero el avance de obras y el pago a proveedores; los contratos y convenios de servicios están rezagados, y algunos están por vencer sin futuro de legalidad y eficiencia, en tanto que las compras de equipamiento están paradas y la reclamaciones y litigios van en aumento.
No obstante, enfatizó, el abasto de medicamentos si está garantizado, "aunque en algunos lugares pende de un hilo".
Insistió en que el control del gasto para el Seguro Social tiene dos consecuencias fatales, una directa para la dependencia teniendo pasillos llenos de espera de personas con dolor y que reciben un maltrato o atención con retraso; el segundo efecto es indirecto, "pero todavía peor", porque la falta de servicios en el seguro social fortalece a la salud privada, lo que ocasionará mayor gasto de bolsillo a las familias.
“Ahorrar y controlar en exceso el gasto en salud es inhumano. Ese control llega a escatimar los recursos para los mexicanos más pobres”, indicó.
Germán Martínez reveló que el IMSS Bienestar, mediante el cual se pretende otorgar medicamentos y consultas gratuitas a la población sin seguridad social, en cifras reales, al día de hoy, tiene menos recursos que el último año del gobierno anterior, porque le deben más de mil millones de pesos del llamado componente de salud, que le correspondía del desaparecido programa Prospera.
Asimismo, señaló que si la Secretaría de Hacienda creyera que los ahorros en el IMSS se pueden desviar a otros fines, "es necesario recordarle" que el Instituto no estará obligado a concentrar en la Teseroría de la Federación sus ingresos según el artículo 277 C de la Ley del Seguro Social.
En su opinión, nadie en su sano juicio se hará cargo desde el Instituto Mexicano del Seguro Social de instrucciones sólo en la Secretaría de Hacienda.
Advirtió que descuidar la recaudación tributaria, así como la debida y justa incorporación de los trabajadores al Seguro Social es suicida para este órgano tripartita.
Manifestó que la mayor corrupción en esta dependencia es la simulación de la declaración de las cuotas subestimadas que roban el esfuerzo diario de los trabajadores, porque con cuotas ficticiamente bajas pierden jubilaciones, pensiones de viudez y créditos para vivienda justos, mientras que algunos patrones acumulan inmoralmente esos recursos.
Martínez Cázares aclaró que el motivo de su diferendo con algunos funcionarios de la Secretaría de Hacienda no es la compra de medicamentos, pues no defiende a farmacéuticas, ni a proveedores o constructores, sino que buscaba fortalecer y hacer respetar al Seguro Social.