TIJUANA.- Este día, familiares de los hombres privados de su libertad la tarde de ayer, confirmaron a las autoridades que éstos fueron dejados en libertad por sus captores, tras ser “levantados” cuando se dirigían en una camioneta de reciente modelo por el bulevar Sánchez Taboada, a la altura de la preparatoria federal Lázaro Cárdenas.

Identificados como Jesús Manuel Labra Félix y Marcos Liborio Félix Labra, hijo y sobrino respectivamente de  Jesús “Chuy” Labra Avilés, quien fuera el principal operador financiero del Cártel Arellano Félix en la década de los ochenta y noventa, su privación de la libertad fue captada en un video que rápidamente se viralizó en redes sociales, lo que provocó una serie de fuertes críticas sobre las autoridades policiacas, al ocurrir los hechos en la Zona Río de Tijuana, el área de mayor vigilancia de la ciudad. 

Apenas esta mañana, en conferencia de prensa el titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) Marco Sotomayor Amezcua, informó que, en el plagio, que duró aproximadamente 50 segundos, participaron al menos 12 sujetos armados, dispersos en cinco vehículos, quienes durante más de una hora estuvieron acechando a las víctimas, mismas que momentos antes se encontraban en un restaurante del distrito gastronómico de Zona Río. 

En la misma conferencia Sotomayor Amezcua reconoció que las víctimas son familiares de un ex operador de un grupo delictivo que se encuentra preso, aunque sin precisar lo que se comenta desde anoche en forma extraoficial. 

El operativo fue muy bien planeado, asentó Sotomayor Amezcua, esperaron que comieran en un restaurante; muy probablemente ya tenían una casa de seguridad lista para guardar las unidades que participaron, que fueron varias para despistar a las autoridades. 

Por eso cuando las autoridades cerraron la Vía Rápida muy probablemente tomaron una ruta alterna, porque en las imágenes de las cámaras se les pierde de vista a la altura de la colonia 20 de Noviembre, indicó. 

Los delincuentes buscan mimetizarse y sorprender, agregó, el perfil de los vehículos es común, incluyó una camioneta de redilas y dos unidades tipo sedán. 

Usaron una Suburban para hacerse pasar por la autoridad y que así los testigos no llamen al 911, agregó.