TIJUANA.- Una sentencia de 42 años y 6 meses de prisión impuso el juez de control a David “N”, asesino material de la doctora Angélica Ciani González, ocurrido el 3 de julio de 2018, en un consultorio médico propiedad de la occisa, ubicado en la colonia Libertad.

La mañana de ese día, el asesino dio muerte de tres balazos a la doctora frente a sus hijos y madre. Semanas después, la progenitora de Angélica Ciani falleció como consecuencia de la impresión recibido por el artero crimen.

El asesinato alcanzó relevancia nacional luego que el hermano de la víctima, el comentarista de la cadena de deportes ESPN, Odín Ciani, denunciara los hechos en sus redes sociales y se hiciera viral.

Para el 14 de julio, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) anunció la detención del autor material de crimen, previamente había adelantado que la ejecución de la doctora fue por equivocación, toda vez que el asesino tenía a otra persona como objetivo.

La detención de David “N”, de 22 años de edad, se dio luego que se recuperase un teléfono celular del imputado en el lugar de los hechos, para lo cual se solicito una orden de intervención a un Juez Federal, obteniendo así datos que permitieron avanzar en las pesquisas del caso.

“Otra persona lo contrata para que prive de la vida a una tercera persona. Este autor material, sin traer mucha información, nada más, lo suben a un vehículo, lo llevan, le dicen ‘vas a privar de la vida’ a la persona que está en tal lugar y se equivoca. Prácticamente se equivocó de puerta”, señaló en su momento el Subprocurador de Investigaciones Especiales, José María González  Martínez.

Esta mañana, Odín Ciani habló con Ciro Gómez Leyva, en el noticiero Por la Mañana, reconociendo el trabajo desplegado por la PGJE, sin embargo recordó que solo se iba a sentenciar al asesino material y aún falta dar con los intelectuales.

Al margen de la sentencia que determinase el juez, el comentarista deportivo dijo que ello no permitirá a él y su familia recuperar a su hermana asesinada y su madre fallecida posteriormente a causa directa de ese crimen, del que fue testigo presencial.