NUEVA YORK.- Joaquín “El Chapo” Guzmán cubrió los gastos de emergencia de un hijo accidentado de Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, subdirector de Seguridad y Custodia en el Penal de Puente Grande, cuando éste se fugó.

Además, le proporcionaba pagos de 50 mil dólares y le dio una casa ganándose la fidelidad de quien aún lo llama “mi compadre”.

Al iniciar su declaración en el juicio de Estados Unidos contra “El Chapo”, misma que se prolongará hasta el jueves, “El Licenciado” recordó que mientras aún era funcionario penitenciario y “El Chapo” estaba preso éste comenzó a pedirle varias cosas, desde poder traer tenis hasta ingresar mujeres. 

López Núñez fue arrestado en la Ciudad de México en mayo del 2017, ahora testifica contra quien le dio empleo después de que renunció a su cargo en septiembre del 2000 por una investigación federal en curso por corrupción en ese penal.

Aseguró que como tras la renuncia del penal ya no volvió a encontrar trabajo, aceptó colaborar con Guzmán Loera.

Empezó a trabajar con “El Chapo” siete meses después de su fuga. Al principio le conseguía casas y ranchos y después armando la logística y negociaciones con los colombianos para trasladar cocaína de Sudamérica a Sinaloa. 

El ex subdirector de Seguridad y Custodia en el Penal de Puente Grande, confirmó la versión de la fuga de El Chapo en un carrito de lavandería, resultado de una idea repentina al escuchar “El Chapo” sobre una posible extradición.