"Otra gran caravana se dirige a nuestro camino. ¡Es muy difícil de detener sin un muro" publicó el presidente norteamericano en Twitter.
WASHINGTON.- El presidente norteamericano Donald Trump parece haber relajado su discurso sobre la caravana migrante, dejando abierta la posibilidad de que irrumpa en su país a falta de su promovido muro con México, cuyo financiamiento no ha sido aprobado por la Cámara de Representantes.
"Otra gran caravana se dirige a nuestro camino. ¡Es muy difícil de detener sin un muro" publicó este viernes a través de su cuenta de Twitter.
Alertó sobre la intención de un nuevo grupo de centroamericanos de llegar a la frontera con México, mismos que ya han ingresado al vecino país del Sur, algunos de ellos de manera ilegal y violenta, como ocurrió el viernes por la madrugada con cerca de 800.
En sus declaraciones hacia la primera caravana, Trump había sido mucho más severo y tajante, advirtiendo que sus integrantes de ninguna manera lograrían irrumpir en su territorio de manera ilegal.
“¡Esta es una invasión de nuestro país y nuestros militares te están esperando!”, advirtió el presidente norteamericano vía Twitter a finales de octubre a los integrantes de la caravana, a quienes calificó de miembros de pandillas y malas personas.
“Muchos miembros de pandillas y algunas personas muy malas se mezclan en la caravana que se dirige a nuestra frontera Sur”.
En ese entonces, Trump pidió a los migrantes que regresaran, pues no serían admitidos en los Estados Unidos a menos que se apegaran al proceso legal.
Ahora dice que sería difícil detenerlos, a pesar de que las garitas internacionales, como el caso de la San Ysidro, han sido reforzadas con infraestructura de cierre y ha habido varios ensayos de contingencia por parte de grupos de seguridad de élite en la frontera, tras el fallido intento de ingreso masivo que protagonizaron centroamericanos en noviembre por San Ysidro.