San Juan.— El reguetón se vistió de incertidumbre la noche del lunes cuando Bad Bunny, uno de los artistas latinos más influyentes del momento, mostró señales de dolor durante su residencia en el Coliseo de Puerto Rico. El intérprete de Un Verano Sin Ti se llevó la mano a la rodilla en medio de su presentación, lo que encendió la preocupación entre los asistentes.

Aunque el cantante continuó el espectáculo, fuentes cercanas indicaron que experimentó molestias físicas que lo obligaron a reducir la intensidad en algunos momentos del show. La reacción de los fanáticos no se hizo esperar: mientras unos aplaudían su entrega pese al malestar, otros pedían que priorizara su salud antes de terminar las fechas restantes.

La residencia de Bad Bunny en San Juan ha sido uno de los eventos musicales más esperados del año en la isla. Aún restan tres conciertos, con fecha final el 14 de septiembre. Hasta ahora, la producción no ha emitido un comunicado oficial sobre su condición médica ni sobre posibles cambios en el calendario.

El “Conejo Malo” ha estado inmerso en una de las giras más intensas de su carrera, y este episodio ha reabierto el debate sobre la exigencia física y emocional que enfrentan los artistas en escenarios de talla mundial.