Lisboa.— La cifra de fallecidos por el descarrilamiento de un tranvía turístico en Lisboa aumentó a 17 personas, tras confirmarse este jueves la muerte de dos pasajeros que permanecían hospitalizados en estado crítico. El accidente ocurrió el pasado martes en el céntrico barrio de Graça, uno de los puntos más visitados por turistas debido a sus estrechas calles y vistas panorámicas de la ciudad.

El vehículo, con capacidad para 60 pasajeros, se descarriló en una curva pronunciada y terminó impactando contra una fachada. Testigos aseguran que el tranvía tomó la pendiente a gran velocidad antes de perder el control. Entre las víctimas se encuentran turistas de distintas nacionalidades y al menos cinco ciudadanos portugueses.

El primer ministro de Portugal, António Costa, expresó sus condolencias y declaró luto nacional de 48 horas. “Es un día de luto para Lisboa y para el país entero. Haremos todo lo posible por esclarecer las causas y apoyar a las familias afectadas”, dijo en conferencia de prensa.

Equipos de rescate y bomberos continúan trabajando en la zona, donde aún se retiran escombros y se asegura la estructura del edificio impactado. Las autoridades investigan si el accidente se debió a un fallo en los frenos del tranvía o a una deficiencia en el mantenimiento.

Este es el peor siniestro de transporte público en Portugal en las últimas dos décadas, lo que ha reavivado el debate sobre las condiciones de seguridad de los tranvías históricos que circulan en Lisboa, íconos de la ciudad y principal atractivo turístico.