OTTAWA.- El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, aclaró hoy, en referencia a la empresa china Huawei, que “independientemente de lo que ocurra en otros países, Canadá es y seguirá siendo un país con estado de derecho”.

Esta fue su reacción ante la sugerencia del presidente estadunidense Donald Trump en el sentido de que podría intervenir en el caso de la fabricante china Huawei si así conviniera a sus intereses comerciales con China.

A petición de Estados Unidos, Canadá detuvo el pasado 1 de diciembre a la ejecutiva de Huawei, Meng Wanzhou, quien fue liberada anoche tras el pago de una fianza de 10 millones de dólares, mientras continúa su posible extradición al vecino del sur.

Sin embargo, las recientes declaraciones de Trump colocan a Ottawa en una posición “incómoda” entre dos potencias, pero el primer ministro canadiense dijo este miércoles, en la sede parlamentaria, que lo que debe predominar en este caso es el respeto a la ley.

Respecto al caso del canadiense detenido el lunes en Beijing por sospecha de realizar un trabajo que es ilegal en China, Trudeau señaló que se está en contacto con funcionarios chinos y que su gobierno ofreció apoyo consular a los familiares de Michael Kovrig, quien trabaja para la firma de análisis International Crisis Group (ICG).

“Este es desde luego un asunto que tomamos muy seriamente y está en curso, independientemente de lo que suceda en otros países. Canadá es y seguirá siendo un país con estado de derecho”, precisó el primer ministro.

Por su parte, Bruce A. Heyman, quien fuera el embajador de Estados Unidos en Canadá durante la gestión de Barack Obama, dirigió un mensaje a Trump en el que sostuvo que su comentario desestima la relación con este país.

Aclaró que el caso Huawei es “un asunto legal y que parece haber sido ejecutado en forma propia y su comentario sólo minimiza un importante acuerdo de extradición que tenemos con nuestro vecino (Canadá)”.