El gobierno danés convocó al encargado de negocios de Washington tras acusar a aliados de Donald Trump de presionar para influir en el estatus de Groenlandia. Copenhague calificó las acciones como “inaceptables” y reafirmó la soberanía de la isla ártica

Copenhague.— La tensión diplomática entre Dinamarca y Estados Unidos escaló este miércoles luego de que el gobierno danés citara al encargado de negocios de la embajada norteamericana. El motivo: una supuesta campaña de influencia promovida por personas cercanas al expresidente Donald Trump para modificar el estatus político de Groenlandia.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Dinamarca describió la situación como “un acto inaceptable de injerencia”, enfatizando que la soberanía de Groenlandia no está en discusión. La isla, territorio autónomo bajo el reino danés, ha sido objeto de interés estratégico de Washington por su ubicación en el Ártico y por sus recursos naturales.

El incidente revive tensiones previas: en 2019, Trump había planteado abiertamente la compra de Groenlandia, lo que generó rechazo absoluto en Copenhague. Ahora, Dinamarca exige explicaciones formales y asegura que llevará el caso a instancias europeas si es necesario.

Expertos señalan que este nuevo episodio podría complicar las relaciones entre ambos países en medio de un escenario internacional ya marcado por la guerra en Ucrania y las disputas comerciales con Asia.