En la madrugada del 26 de junio, un fenómeno astronómico sorprendió a cientos de habitantes del sureste de Estados Unidos cuando un meteoro surcó el cielo con una luminosidad inusualmente intensa. La American Meteor Society (AMS) recibió más de 140 reportes en menos de media hora, provenientes principalmente de los estados de Georgia, Alabama y Carolina del Sur.

Según testigos, la bola de fuego fue visible durante varios segundos y produjo un fuerte estallido sónico. Horas más tarde, en Henry County, Georgia, una familia reportó daños en su vivienda tras escuchar un estruendo. Al inspeccionar el lugar, encontraron un agujero en el techo y fragmentos rocosos en el interior, que podrían ser restos del meteoro.

Expertos del Departamento de Geología de la Universidad de Georgia se desplazaron al lugar para realizar un análisis preliminar. Aunque aún no se confirma oficialmente la procedencia extraterrestre del objeto, los indicios apuntan a que se trata de un fragmento del bólido observado.

“No es común que un meteoro sobreviva la atmósfera y cause daños directos en estructuras urbanas. Esto podría ser un caso excepcional en la astronomía reciente de EE. UU.”, declaró la astrónoma Dra. Lisa Newton.

La NASA también ha sido notificada del suceso y evalúa si el meteoroide estaba dentro del rango de detección de sus sistemas de monitoreo.