El gobierno de Estados Unidos anunció un arancel del 25% a la importación de acero y aluminio, una medida que afecta a países exportadores como México y China. Analistas advierten sobre posibles represalias y un impacto en la industria manufacturera
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este lunes la implementación de un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio, con el argumento de fortalecer la industria nacional y proteger empleos en el sector siderúrgico.
La medida, que entrará en vigor en las próximas semanas, ha generado una reacción inmediata en los mercados globales. China, uno de los principales productores de acero, calificó la decisión como “una amenaza al comercio internacional” y advirtió sobre la posibilidad de tomar represalias.
En México, la industria acerera también expresó su preocupación, ya que Estados Unidos es su principal socio comercial en este sector. Empresas del ramo han pedido a la Secretaría de Economía una respuesta inmediata para mitigar los efectos de la medida.
Expertos advierten que esta política proteccionista podría desencadenar una guerra comercial con consecuencias a nivel global, afectando a exportadores de acero y aluminio en diversas regiones del mundo.