La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió sobre el alarmante deterioro de la situación humanitaria en el norte de Gaza, donde desde hace más de tres meses no ha ingresado ayuda alimentaria. Según informes oficiales, más de 2 millones de personas están atrapadas en una crisis de hambre, intensificada por la falta de suministros esenciales.

“Estamos enfrentando un desastre humanitario de proporciones históricas. Sin alimentos ni medicinas, la población está al borde de un colapso total”, declaró un portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA).

La ONU responsabiliza al bloqueo impuesto en la región, que impide la entrada de convoyes de ayuda humanitaria. A pesar de los llamamientos internacionales para permitir el acceso, las tensiones entre las partes involucradas han dificultado las negociaciones.

Organizaciones humanitarias han alertado sobre los crecientes casos de desnutrición, especialmente entre niños y ancianos, así como brotes de enfermedades debido a la falta de acceso a agua potable y servicios básicos de salud.

Líderes internacionales y organismos no gubernamentales han pedido una respuesta urgente para evitar que la situación escale a niveles catastróficos.