La medida podría provocar una caída del 213% en la competitividad de los puertos mexicanos frente al Caribe, impactando severamente al transporte turístico en México
ENSENADA.- Humberto Valdés Romero, presidente de la Federación de Transporte y Experiencias en Rutas Vinícolas (FETRAEX), advirtió que la reciente aprobación de un impuesto de $42 para los pasajeros extranjeros de cruceros pone en riesgo no solo la competitividad de los puertos turísticos de México, sino también la estabilidad de miles de empleos en el sector de transporte turístico.
“El Congreso ha eliminado la exención del pago de derechos migratorios para pasajeros de cruceros, lo que ahora obliga a cada visitante a pagar una tarifa de $42, aun si no pernoctan en el país. Esto genera un encarecimiento significativo de nuestros destinos frente a otros del Caribe, afectando la llegada de más de 10 millones de turistas y, con ello, el transporte turístico que depende de ellos”, explicó Valdés Romero.
De acuerdo con Valdés Romero, los puertos mexicanos podrían perder hasta 3,300 escalas de cruceros en 2025. “El transporte turístico terrestre es uno de los sectores más afectados. Cada crucero representa no solo pasajeros, sino también rutas para transportistas, operadores de autobuses, taxis turísticos y hasta servicios especializados de logística. Este impuesto amenaza directamente a toda la cadena de valor del turismo”, señaló.
El impacto económico será profundo, añadió. “Los proveedores locales, desde operadores de transporte hasta guías turísticos, se verán afectados. Estamos hablando de una medida que podría desestabilizar a miles de familias que dependen de este flujo de visitantes, especialmente en destinos como Cozumel, que recibe cerca de cuatro millones de cruceristas al año”, apuntó el líder empresarial.
Valdés Romero indicó que la Florida-Caribbean Cruise Association (FCCA), que representa a 22 líneas de cruceros, ya ha mostrado su inconformidad con la medida. “La FCCA advirtió que podrían reconsiderar incluir puertos mexicanos en sus itinerarios. Esto no solo afectará a los puertos, sino también a todos los transportistas y servicios que dependen del turismo de cruceros”, enfatizó.
El sector de transporte turístico, según Valdés Romero, también perderá competitividad internacional. “Los costos adicionales ahuyentarán a los visitantes, reduciendo los ingresos de transportistas y aumentando la dependencia económica en otras actividades menos dinámicas”, explicó.
El presidente de FETRAEX urgió a las autoridades a replantear esta medida para evitar que el turismo, uno de los pilares económicos de México, se vea afectado. “Nuestro país podría pasar de ser un líder en turismo de cruceros a convertirse en un destino de segunda opción. Es necesario que se analice el impacto integral en sectores como el transporte turístico, que es vital para la economía nacional”, concluyó Valdés Romero.