Un equipo de investigadores ha logrado un avance en la tecnología de baterías que podría marcar el futuro de la movilidad eléctrica. Esta nueva batería, diseñada para vehículos eléctricos, destaca por su durabilidad y bajo costo de producción, factores clave que podrían reducir el precio de los autos eléctricos y hacerlos más competitivos frente a los vehículos de combustibles fósiles.

La nueva tecnología utiliza materiales alternativos que no solo extienden la vida útil de la batería, sino que también disminuyen el impacto ambiental en su fabricación.

“Este desarrollo permite que más personas puedan acceder a un transporte sostenible, lo cual es esencial para reducir las emisiones de carbono y alcanzar los objetivos de cero emisiones,” declaró uno de los investigadores principales.

Este avance cobra especial relevancia en un momento en el que el mercado global busca alternativas para enfrentar el cambio climático. Se espera que, con baterías más económicas y duraderas, la adopción de vehículos eléctricos se acelere, ayudando a disminuir la dependencia de combustibles fósiles.