La creciente confrontación entre potencias nucleares como Rusia y EE. UU. eleva el riesgo de un conflicto nuclear. Expertos advierten sobre la escalada de tensiones, alimentadas por el conflicto en Ucrania y el resurgimiento de conflictos en Medio Oriente

El riesgo de una guerra nuclear ha aumentado en los últimos meses, debido a las tensiones crecientes entre las principales potencias nucleares. Rusia, en medio de su confrontación con Ucrania y Occidente, ha intensificado su retórica nuclear, lo que ha generado preocupación en la comunidad internacional.

Estados Unidos, por su parte, mantiene su postura firme en el apoyo a Ucrania, lo que ha elevado las tensiones con el Kremlin. A esto se suman las crecientes tensiones en el Medio Oriente, especialmente con el conflicto entre Israel y Hamas, que también involucra a grandes potencias internacionales.

Organismos internacionales han expresado su alarma por el aumento del armamento nuclear en la región y la falta de avances en los esfuerzos diplomáticos para mitigar la situación. Los expertos advierten que el riesgo de un error de cálculo o un incidente militar que desencadene un conflicto nuclear es ahora más alto que en décadas anteriores.