En el conflicto entre Ucrania y Rusia, más de 80,000 soldados ucranianos han desertado durante el transcurso del 2024, lo que pone de manifiesto las tensiones internas y los desafíos que enfrenta el ejército en plena guerra

El ejército ucraniano ha sido testigo de un creciente número de deserciones en lo que va del año, con más de 80,000 soldados abandonando sus puestos, según informes oficiales. Más de la mitad de estas deserciones se registraron durante los primeros ocho meses del 2024, reflejando las dificultades internas que enfrenta el país en su lucha contra la invasión rusa.

La situación ha generado alarma entre los altos mandos militares y en el gobierno de Kyiv, que teme que la moral y el agotamiento afecten aún más la capacidad de combate de sus fuerzas.

Desde que comenzó la invasión rusa en 2022, Ucrania ha dependido de una movilización masiva de sus ciudadanos para resistir el avance de las tropas rusas. Sin embargo, la prolongada duración del conflicto, las intensas batallas y las condiciones extremas del frente han desgastado a muchos soldados.

Los expertos militares sugieren que las deserciones podrían ser un indicador de la fatiga que sufre el ejército ucraniano, a pesar de la ayuda internacional y la entrega de nuevo equipamiento militar.

En respuesta, el gobierno ucraniano ha implementado medidas para frenar las deserciones, incluyendo un endurecimiento de las penas para los desertores y la promoción de programas de bienestar mental para los soldados en el frente. Sin embargo, la situación sigue siendo crítica y representa un reto significativo en la defensa de Ucrania contra la invasión rusa.