La inflación en México continuó su tendencia a la baja en la primera quincena de septiembre, alcanzando un 4.66% anual, de acuerdo con información proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Este descenso representa la cifra más baja desde la segunda quincena de mayo de este año y marca la cuarta quincena consecutiva de moderación.

El descenso en la inflación estuvo impulsado principalmente por la reducción de precios en alimentos frescos, lo que contribuyó a que el índice de precios al consumidor se mantuviera a la baja.

Esta tendencia también ha abierto la posibilidad de que el Banco de México considere la reducción de tasas de interés en su próxima reunión, según analistas.

A pesar de esta noticia positiva para los consumidores, el panorama económico sigue siendo incierto, especialmente en sectores clave como el de inversión productiva, que ha mostrado signos de debilidad en meses recientes.

El comportamiento de la inflación continuará siendo un factor determinante para la toma de decisiones económicas y financieras en lo que resta del año.