Brasil encabeza la lista de países más afectados por incendios forestales este año, con el 60% del cielo de ciudades como São Paulo y Río de Janeiro cubierto de humo. Portugal y Hungría también sufren desastres naturales, entre ellos inundaciones devastadoras y fuegos incontrolados
América del Sur ha alcanzado un récord histórico de incendios forestales en 2024, superando las cifras registradas en 2017. Brasil es uno de los países más afectados, con vastas áreas de la Amazonía y otras regiones boscosas consumidas por el fuego.
Hasta el 60% del cielo de ciudades clave, como São Paulo y Río de Janeiro, ha estado cubierto de humo denso, afectando la calidad del aire y la salud pública.
Este fenómeno, vinculado al cambio climático, se ha visto exacerbado por condiciones climáticas extremas como olas de calor y sequías prolongadas. Los incendios han sido tan intensos que varios estados brasileños han declarado emergencias y pedido apoyo internacional para controlar la situación.
En Europa, los desastres naturales también están cobrando protagonismo. En Hungría, las peores inundaciones en dos décadas han desbordado el río Danubio, inundando ciudades y aldeas a lo largo de su curso. Portugal, por su parte, lucha contra más de 100 incendios forestales, lo que ha llevado al gobierno a decretar el estado de calamidad, con un saldo de varias víctimas mortales hasta la fecha.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la creciente frecuencia e intensidad de estos desastres, pidiendo medidas urgentes para mitigar los efectos del cambio climático.