MEXICALI.- Los menores en situación de movilidad sufren de un rezago académico, debido a diferentes motivos por los que no se pueden adaptar a su nuevo entorno, comentó el Dr. Carlos Antonio González Palacios, Director de Humanidades y del Centro de Excelencia en Desarrollo Humano y Social, CETYS Universidad, campus Mexicali.

Las personas en movilidad o migrantes, explicó, son todas aquellas que han cambiado de país o residencia, esto es independiente de su situación legal o los motivos de su desplazamiento, los cuales pueden ser laborales y económicos o de violencia y guerra. Según el Instituto Nacional de Migración (INM) en 2023 se identificaron 106,778 de menores migrantes en México.

“El niño y el adolescente no deciden migrar, son sus padres o es la madre quien toma la decisión. Antes era un asunto relacionado con el tema económico, la falta de oportunidades, lo sigue siendo, pero ya no es el principal motivo por el cual las familias piden asilo en Estados Unidos; ahora es para huir de la violencia”, agregó el experto CETYS.

Debido a la migración el infante no solo ve interrumpido su proceso de enseñanza, sino que otros aspectos de su vida son afectados, “la educación no solamente es asistir a una aula, es una serie de interacciones, un grupo social, tener amigos, esto es casi es tan importante como lo que van a aprender en los salones”, mencionó el Dr. González Palacios.

A pesar de que las autoridades estatales faciliten la integración de los niños, niñas y adolescentes en los salones, pueden existir otros obstáculos como el bullying, sentirse incómodas o no comprender el idioma. Por otra parte, en las escuelas no hay una formación docente para recibir a alguien que puede estar un par de semanas o un mes, pues si bien tiene una cita consular a través de la app de CBP One, no saben cuánto tardará la respuesta.

Aquellos que no pudieron continuar con su educación en alguna institución, son apoyados por las autoridades educativas, por ejemplo, hay albergues donde hay salones hechos específicamente para impartir clases y van profesores del sistema educativo. Hay otros que no cuentan con la infraestructura para poder recibirlos, por lo que buscan otras opciones, como la educación a distancia.

Otra de las consecuencias que pueden sufrir derivado de los cambios por los que han pasado es que algunos de los niños retrocedieron cognitivamente, por ejemplo, ya leían y dejan de hacerlo, “eso se explica en general por el ambiente en el que están, ellos reciben, digamos, esa violencia de ser arrancados de su espacio, de sus entornos de socialización, por eso no es de extrañar ese tipo de consecuencias”, señaló el experto.

Para finalizar, el experto CETYS, señala que hasta el momento no existe algún programa por parte de las autoridades o los albergues, que le den seguimiento a la educación de los niños y niñas en movilidad una vez que cruzan a Estados Unidos.