La industria cinematográfica y televisiva en México experimenta un crecimiento significativo gracias al fenómeno del “nearshoring”, atrayendo importantes proyectos internacionales
La industria del cine y la televisión en México está viviendo una etapa de crecimiento sin precedentes, impulsada por la tendencia global del “nearshoring”. Este fenómeno, que implica la relocalización de servicios y producción cerca del mercado principal, ha favorecido a México debido a su proximidad con Estados Unidos, su infraestructura robusta y la disponibilidad de talento local.
En los últimos meses, varias productoras internacionales han optado por México como destino para sus proyectos, aprovechando no solo los incentivos fiscales, sino también la diversidad de locaciones que ofrece el país. Este auge ha llevado a un aumento en la generación de empleos en el sector y ha consolidado a México como un hub creativo en América Latina.
El impacto del “nearshoring” no solo se ve reflejado en la cantidad de producciones, sino también en la calidad de las mismas. Producciones de alto perfil y con presupuestos significativos están eligiendo México como su base de operaciones, lo que además está fomentando el desarrollo de talento local y la profesionalización del sector.
Según un reporte reciente de El País, este crecimiento está contribuyendo de manera notable a la economía nacional, destacando la importancia del cine y la televisión como motores de desarrollo económico y cultural. Los expertos anticipan que esta tendencia se mantendrá al alza en los próximos años, fortaleciendo aún más la posición de México en la industria global del entretenimiento.