Promueven campañas de consumo nacional de frutillas y de acceso a nuevos mercados internacionales y mantienen una política de atención para los trabajadores del campo, con salarios justos, capacitación, equidad de género y oportunidades para los jóvenes
CIUDAD DE MÉXICO.- El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, afirmó que fueron fortalecidas las políticas públicas para contribuir a robustecer la cadena productiva berries y abrir nuevos mercados, toda vez que en 2023 se alcanzó un valor de exportación por tres mil 937 millones de dólares, es decir, 4.0 por ciento más en comparación con el año anterior.
Al dictar la conferencia magistral “El impacto de las berries en el sector agroalimentario de México”, calificó como "orgullo de México" a estas frutillas porque la zarzamora y la fresa se colocaron en primer lugar del ranking mundial, con ventas equivalentes a 777 millones de dólares y mil 240 millones de dólares, respectivamente, y la frambuesa tuvo la segunda posición con mil 343 millones de dólares.
En el marco de las actividades de la edición 14 del Congreso Internacional Anaberries, detalló que en materia de producción la zarzamora ocupó el primer lugar mundial, con 238 mil 122 toneladas, y la fresa y la frambuesa se ubicaron en el segundo lugar, con 641 mil 552 toneladas y 190 mil 413 toneladas.
Frente a representantes de los distintos eslabones de esta cadena productiva, puntualizó que en la producción de arándanos se registraron 80 mil 133 toneladas, lo que lo colocó en el quinto lugar mundial y séptimo como exportador, con valor comercial de 776 millones de dólares.
A nivel nacional, dijo, la producción de frutillas fue de 1.15 millones de toneladas en 42 mil 975 hectáreas en 2023 y destacaron los estados de Michoacán, con 658 mil 969 toneladas; Jalisco, 184 mil 697, y Baja California, 140 mil 478.
Al hacer un corte al 31 de mayo del año en curso, Villalobos Arámbula informó que la producción nacional de berries mantiene una tendencia al alza e incluso podría rebasar lo obtenido en 2023, pues en fresa, frambuesa y zarzamora se han cosechado 397 mil 234 toneladas, 73 mil 058 toneladas y 129 mil 448 toneladas, respectivamente.
El titular de la Secretaría de Agricultura remarcó que esta actividad beneficia a las familias al proveerles de alimentos y recursos económicos, toda vez que genera al menos 500 mil empleos directos en 21 entidades del país.
De ese número, indicó, la producción de fresa aporta 38 por ciento del total de las fuentes de empleo, la de frambuesa ofrece 23 por ciento, la de zarzamora contribuye con 22 por ciento y la de arándano con 17 por ciento.
Retos para un desarrollo sostenible
Entre los retos por atender en la cadena productiva está fortalecer su capacidad productiva con el uso de la innovación tecnológica, seguir con alianzas sector público-sector privado para acceder a los bienes públicos al servicio de los productores y promover buenas prácticas agrícolas, orientadas al manejo integrado de plagas y enfermedades y al cuidado de los recursos suelo y el agua, afirmó.
Es también importante promover campañas de consumo nacional de frutillas y de acceso a nuevos mercados internacionales y mantener una política de atención y condiciones dignas para los trabajadores del campo con salarios justos, capacitación, equidad de género y oportunidades para los jóvenes, subrayó Villalobos Arámbula.
Sostuvo que la industria seguirá contando con los bienes y servicios públicos para asegurar la sanidad, la inocuidad y calidad de los alimentos producidos y participar en campañas de prevención, control y erradicación de enfermedades y plagas, a través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
Apuntó que el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) aporta líneas de investigación y comercialización mediante el diseño de una guía técnica para el óptimo comportamiento de las variedades de esta fruta, en genética, fisiología y fitosanidad, además desarrolla tecnología para producir plantas de zarzamora con alta calidad genética en laboratorios de cultivo de tejidos y viveros.
El funcionario federal reiteró la relevancia de contar con investigación, desarrollo, información y estadística para la toma de decisiones y apertura comercial para el sector agroalimentario de México.