ENSENADA.- En la Plaza Cívica de la patria, autoridades militares y civiles, encabezadas por el presidente municipal de Ensenada, Armando Ayala se realizó la ceremonia cívica conmemorativa al CLII aniversario del fallecimiento de Don Benito Juárez.

En el acto protocolario, el primer edil recordó que fue un 18 de julio de 1872, a los 66 años en la Ciudad de México cuando murió el licenciado Benito Pablo Juárez García, presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, precisamente cuando planeaba su reelección, falleció por un infarto en sus habitaciones de Palacio Nacional, donde residía.

“El ex presidente Juárez García nació el 21 de marzo de 1806 en San Pablo Guelatao, Oaxaca, tuvo una niñez precaria y durante años estudió por sí mismo, hasta que llegó a la ciudad de Oaxaca, donde ingresó al seminario; ahí concluyó sus estudios de Latín, Filosofía y Teología e inició su larga carrera”, resaltó.

Armando Ayala mencionó que el llamado Benemérito de las Américas fue un jurista y político mexicano de origen indígena de la etnia zapoteca que se desempeñó como presidente de México en varias ocasiones, desde el 21 de enero de 1858 hasta el 18 de julio de 1872.

Dijo que procuró el equilibrio económico y ejecutó algunas obras públicas como caminos, reconstrucción del Palacio de Gobierno, fundación de escuelas normales; levantamiento de una carta geográfica y la formación del plano de la ciudad de Oaxaca; reorganizó la Guardia Nacional y dejó superávit en el tesoro.

“Considerado uno de los más destacados forjadores de la patria, Benito Juárez marcó un parteaguas en la historia de México, al lograr la consolidación de la República. Fue un liberal y republicano, abogado, Diputado Federal, Gobernador de Oaxaca, Ministro de la Suprema Corte y Presidente de la República”, destacó.

Por su parte, Eduardo de la Vega Smith, quien preside el Seminario de Historia de Baja California, manifestó que Benito Juárez, puede ser considerado como el más grande los héroes que ha dado nuestra patria.

Mencionó que es un personaje que tiene todos los méritos, y que no solo debe ser recordado por haber llegado a la presidencia de México, ya que el lugar privilegiado que tiene en la historia del país, es por haber sido un estadista, constructor de instituciones fundamentales que han trascendido más allá de su momento histórico y un político que consolidó el estado nacional laico y republicano.