Una 150 personas se unieron a la caminata en honor al joven desaparecido Erick Carrillo, para conmemorar su cumpleaños 25 años
TIJUANA.- Aproximadamente 150 personas se unieron a la caminata en honor al joven desaparecido Erick Carrillo, para conmemorar su cumpleaños 25 años.
La marcha fue liderada por su padre, Eddy Carrillo, y recorrió la colonia El Dorado, lugar donde fue visto por última vez en 2019.
Encabezada por Eddy Carrillo, el padre de Erick, la caminata comenzó en la calle Pánfilo Natera. Con un semblante serio pero resuelto, Eddy expresó su dolor y esperanza.
“Como padre ha sido muy difícil, éramos como amigos. En Tijuana andamos juntos, lo acompañaba al estadio de fútbol y también con sus amigos; en Estados Unidos trabajamos juntos”, compartió con los presentes.
La marcha también contó con la participación de familias y amigos, todos unidos por el deseo de recordar a Erick y exigir justicia.
Desde la desaparición de su hijo, Eddy ha fundado el Colectivo Todos Somos Erick Carrillo, una organización que ha localizado a mil 500 personas, tanto con vida como sin vida, en Tijuana, México y Guatemala.
“Seguimos esperando por parte de la Fiscalía de Baja California que tengan el contexto de la desaparición de Erick Carrillo”, manifestó Eddy durante la caminata.
La frustración y el anhelo de respuestas eran palpables entre los asistentes.
El recorrido de la caminata incluyó partes del bulevar Casa Blanca y la calle General Felipe Ángeles, hasta culminar en la plaza El Dorado. A lo largo del trayecto, los participantes portaron pancartas y fotografías de Erick, manteniendo viva su memoria y la esperanza de su regreso.
A la caminata se unieron diversos colectivos y personas que, al igual que Eddy, buscan a sus seres queridos desaparecidos. La unidad y la solidaridad fueron evidentes en cada paso que dieron, demostrando que la lucha por la justicia y la verdad sigue vigente.
El evento concluyó con un emotivo mensaje de Eddy Carrillo, agradeciendo el apoyo de todos y reafirmando su compromiso de continuar la búsqueda de su hijo y de tantas otras personas desaparecidas en Tijuana y Baja California.