Marco Antonio Morales, es el propietario de "La Fábrica del Dulce", lugar donde se crean desde cero y de manera artesanal, una gran variedad de dulces tradicionales mexicanos
TIJUANA.- Marco Antonio Morales, es el propietario de "La Fábrica del Dulce", lugar donde se crean desde cero y de manera artesanal, una gran variedad de dulces tradicionales mexicanos, que con su sabor generan sonrisas y alegres recuerdos en los corazones de sus clientes.
La elaboración del dulce tradicional mexicano, es una tradición heredada por la madre de Marco Antonio Morales, quien desde muy pequeño aprendió todo sobre la creación del dulce mexicano, años después conoció a su esposa, Viridiana Álvarez y fue ella quien empezó a vender en los sobre ruedas.
Debido al gran sabor y éxito que tuvieron, comenzaron a participar en eventos locales, como el "Cochi Fest" y "Tijuana Emprendedora", hasta que lograron crear su propio establecimiento en la calle Segunda, a la altura del Hospital Guadalajara, de Zona Centro.
Marco Antonio, mencionó que aprendió todo de su madre, ese era el trabajo con el que ella llevaba el sustento a su hogar y de ahí fue donde aprendió a sacar una sonrisa en las personas a través del dulce.
"Por eso la frase que dice; fabricando dulces recuerdos, porque el dulce artesanal mexicano es nostálgico y despierta los recuerdos de la infancia en las personas", expresó.
La mayoría de sus clientes son personas mayores o personas originarias de México que migraron hace muchos años a Estados Unidos, ellos llegan a su puesto, porque ahí encuentran los dulces que consumían en su infancia.
"Se debería de tener en cuenta nuestro origen y sentirnos orgullos de donde venimos, de nuestras raíces, México es muy bonito y su cultura y tradiciones son muy hermosas", señaló.