CIUDAD DE MÉXICO.- Una niña de ocho años de edad con quemaduras en una cuarta parte de su cuerpo se encuentra delicada tras el avionazo de Durango. Ella y el piloto que fue intervenido quirúrgicamente el martes en la noche y se reporta estable, son los casos de heridos más vulnerables tras el accidente aéreo.

Autoridades estatales de Durango mencionaron que 23 lesionados permanecían hospitalizados hasta anoche, pero la menor y el piloto fueron los más afectados en su salud tras el accidente.

La niña tiene quemaduras de primero, segundo y tercer grado en el 25 por ciento de su cuerpo y es atendida en el Hospital Materno Infantil, comentó Fernando Ríos, vocero de la Secretaría de Salud de Durango.

En el caso del piloto, identificado como Carlos Galván Meyran, y a cuya pericia se atribuye que no hubiera víctimas fatales por el desplome del avión, presenta una lesión cervical y fue intervenido quirúrgicamente para fijarle la columna y evitar un daño mayor; su estado de salud es estable.

Sobre los hospitalizados tras el desplome el vocero de la Secretaría de Salud acotó que 14 se hallaban en hospitales privados, dos en el IMSS, uno en el Hospital 450 de Durango y seis en el Hospital Militar de Durango.

Por su parte, el gobernador de Durango, José Rosas Aispuro, afirmó que la salud de las personas hospitalizadas evoluciona favorablemente. "Hay dos casos más graves, el del comandante de la aeronave, el piloto, y una niña que sufrió quemaduras considerables; el resto de las personas tiene lesiones. Hay una evolución favorable".

La tarde del martes la aeronave Embraer 190, matrícula XA-GAL, de la empresa Aeromexico Connect, vuelo AM2431 con destino a la Ciudad de México, se desplomó a minutos de despegar del aeropuerto de Durango, dejando un saldo de 103 de personas lesionadas, entre ellos 88 pasajeros adultos, 11 niños y cuatro integrantes de la tripulación. No hubo víctimas fatales.

Con información de Milenio y Excélsior