Se mantuvo la contracción del producto interior bruto (PIB) de 0.3% en 2019, el primer año de gobierno de López Obrador, según exhibió el presidente en una gráfica
CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente, Andrés Manuel López Obrador, proyectó este Martes que terminará su sexenio con un promedio de crecimiento económico anual de 1.3%, un incremento mayor a lo esperado tras los ajustes en la medición del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
“Estas cosas no se conocen, menos si nos favorecen. El INEGI hizo un ajuste que hace periódicamente para revisar la tasa de crecimiento anual y resultó de esa revisión reciente que en el periodo nuestro ha sido un poco más el crecimiento económico del que estaba ya establecido”, expresó en su rueda de prensa diaria.
El mandatario se refirió al ajuste que hizo el INEGI la semana pasada, cuando anunció que cambiará el año base de medición a precios corrientes de 2018 en lugar de 2013, una revisión rutinaria que el instituto autónomo hace cada cinco años con base en parámetros de organismos internacionales.
Con base en estos ajustes, se mantuvo la contracción del producto interior bruto (PIB) de 0.3% en 2019, el primer año de gobierno de López Obrador, según exhibió el presidente en una gráfica.
Mientras que el desplome de 2020, el año de la pandemia por Covid-19, creció a un 8.8% desde una medición previa de 8.2%.
Pero, en consecuencia, los crecimientos fueron mayores en los años siguientes, con un incremento de 6.1% en 2021 en lugar de 4.8% y de 3.9% en 2022 en vez de 3.1%.
Para este 2023, el PIB acumula un crecimiento de 3.7% interanual en la primera mitad del año.
“Esto, si se suma, da un promedio ya positivo de 0.9%, promedio anual de crecimiento, que eso es un milagro, y yo espero que para el 2024 esto se convierta en cuanto menos 1.3% para que el per cápita, es decir, el crecimiento por persona, sea igual que antes de la pandemia”, detalló.
El presidente descartó para su último año en el poder una crisis interna en México o una externa en Estados Unidos en 2024, cuando ambos países tendrán elecciones presidenciales.
“Hay que cuidar el mediano plazo, de acuerdo a mi análisis no vamos a tener crisis interna porque no va a haber crisis financiera en Estados Unidos por la elección presidencial”, indicó.