Si como consumidores nos volvemos más exigentes y responsables con el medio ambiente y con nuestra billetera, las empresas no tendrán más alternativa que fabricar productos más duraderos
MEXICALI.- La fatiga de materiales es un fenómeno que afecta a todos los productos y materiales en su vida útil, ya sean objetos de uso cotidiano o infraestructuras más complejas como aviones, edificios e incluso las viviendas familiares.
Se trata de un proceso degradativo que ocasiona la pérdida gradual de las propiedades de los materiales con los que son elaborados los productos de las distintas industrias.
Este proceso es exponencial y no se nota hasta que se ha producido una importante disminución en las propiedades del material, explicó el Dr. Juan Andrés Rivera Santana, docente de tiempo completo en la Escuela de Ingeniería de CETYS Universidad Campus Mexicali.
“Inicialmente no se nota, no se ve, hasta que llega el momento en que se va dando el declive. La mejor manera de ralentizar la fatiga, desde el punto de vista práctico, es a través del mantenimiento, especialmente hablando de urbanización e industria. A todos nos ha pasado ver un servicio o un producto que no está funcionando adecuadamente y pensar que está descuidado o desatendido; es ahí cuando podemos identificar que la fatiga del material ya ha hecho sus estragos”.
De hecho, la falta de mantenimiento es uno de los principales motivos por los que los productos dejan de ser útiles, aunado a la obsolescencia programada que afecta a gran parte de la oferta de bienes en la actualidad.
Este fenómeno también está muy relacionado con el sistema económico actual, ya que los productos se han venido fabricando con una calidad cada vez menor para que los usuarios tengan que reemplazarlos con mayor frecuencia. Sin embargo, la demanda del mercado también influye en este proceso, por lo que los consumidores también influyen en la durabilidad de los productos que compran.
La economía circular es una alternativa a la obsolescencia programada, ya que promueve la reducción, el reciclaje y la reutilización de los productos. "Si como consumidores nos volvemos más exigentes y responsables con el medio ambiente y con nuestra billetera, las empresas no tendrán más alternativa que fabricar productos más duraderos".
Pero, retomando el tema del mantenimiento, su implementación no sólo es importante en el ámbito de los productos de uso cotidiano, sino también en infraestructuras más complejas. Cuando un avión o un edificio no se someten a un mantenimiento adecuado, pueden aparecer grietas que se agravan con el tiempo y comprometen la seguridad de las personas que los utilizan.
En el ámbito profesional, la fatiga de materiales es un tema fundamental para los ingenieros mecánicos, mecatrónicos, aeroespaciales y de materiales. Cada uno de ellos lo aborda desde diferentes puntos de vista, pero todos tienen la responsabilidad de encontrar un equilibrio entre criterios técnicos y económicos, pensando primordialmente en la seguridad de los usuarios y consumidores.
“En el pasado, presente y futuro, fue, es y seguirá siendo indispensable contar con profesionales en el ámbito, que conozcan y comprendan que la fatiga se comporta de manera diferente dependiendo de cada tipo de material; el conocimiento de los componentes con los que están trabajando y la manera en la que se propaga la fatiga en ellos es clave para tomar decisiones acertadas respecto al mantenimiento y a la manufactura de los productos”, concluyó el docente.