Industriales llaman a tomar en cuenta todos los factores a la hora de tomar decisiones en comercio exterior.
TIJUANA.-El aumento de aranceles a diversos productos entre México y Estados Unidos, son decisiones que finalmente afectarán a los consumidores de ambos países derivado de un posible fenómeno de incremento inflacionario, e incluso de Canadá, que también está incluido en la medida estadounidense.
Así lo consideró el presidente de la Asociación de Industriales de la Mesa de Otay, Salvador Díaz González, al señalar que ante el anuncio del gobierno de Estados Unidos, que impondrá aranceles del 25 y el 10 por ciento al aluminio y acero mexicano que ingrese a ese país, es fundamenta analizar la condición de cada una de las empresas en la materia, y medir las posibles afectaciones.
El líder empresarial consideró sorpresiva la decisión del presidente Donald J. Trump, porque la unión americana se trata de un importante socio comercial de México.
No obstante, recalcó que el gobierno mexicano tenía listo un “Plan B” para enfrentar la decisión estadounidense, ya que se impondrán aranceles más altos a productos que ingresen a territorio nacional.
Puso como ejemplo la carne de cerdo, arándanos, lámina caliente, tuberías, lámparas, embutidos, manzanas, uvas, quesos, entre otros productos, como una medida de respuesta a la política comercial del republicano.
Para el especialista, se trata de “tiros precisos” de la administración mexicana, que buscan resarcir los daños económicos de la medida arancelaria, y agregó que la medida no afectará a las importaciones de productos de Estados Unidos a México, sino los productos finales, como automóviles, que salgan de territorio mexicano.
Puntualizó que es necesario evaluar los casos y los costos correspondientes por parte de las empresas para tomar mejores decisiones, como buscar nuevas fuentes comerciales.
Lamentó que el afectado final de las decisiones será el consumidor final de ambos países derivado de un posible fenómeno de aumento inflacionario, e incluso de Canadá, que también está incluido en la medida norteamericana.
Opinó que es necesario conocer exactamente de dónde provienen nuestros proveedores, y los productos que traemos, por lo que hay que acercarse a los asesores expertos en Comercio Exterior.
Comentó que la decisión de Trump ya generó implicaciones en tipo de cambio, ya que el dólar superó los 20 pesos, lo que daña la economía, sumado factores internacionales y políticos, como el proceso electoral en México, por lo que se espera que Canadá y la Unión Europea tomen decisiones al respecto.
Por último, comentó que la región fronteriza exporta a Estados Unidos con frecuencia productos electrónicos de tipo aeroespacial, por lo que se deben tomar en cuenta todos los factores para elaborar presupuestos y establecer conclusiones.